El Mundial de Qatar quedará en la historia por haber entregado al público una de las mejores finales, con ribetes de un guion de película, que explica la magia de un deporte como el fútbol. Esa definición del 18 de diciembre de 2022 entre la Argentina y Francia en el Estadio Lusail ofreció muchos momentos destacados y, a pocos días de cumplirse el segundo aniversario de esa fecha, surgió en las redes un detalle inédito en uno de los goles de Kylian Mbappé.
La Selección de Lionel Scaloni tuvo una actuación descomunal en la primera parte, yéndose al vestuario con una ventaja de dos tantos por los goles de Lionel Messi y Ángel Di María. La exhibición llegó a una escala que obligó a Les Bleus a realizar dos cambios antes del cierre de esos 45 minutos. De regreso al complemento, la Albiceleste profundizó su dominio en el campo de juego y la tercera estrella parecía quedar a la vuelta de la esquina.
Sin embargo, los dirigidos por Didier Deschamps reaccionaron de la mano de su emblema y principal figura, Kylian Mbappé. En cuestión de 95 segundos, la Tortuga igualó un trámite adverso en suelo qatarí con un gol de penal enviado a la red con el cronómetro marcando 79:24 y, a los 80:59, llegó su doblete con un remate de volea que vulneró la valla de Emiliano Martínez.
En esa acción, hubo una particularidad que se viralizó en las redes sociales a partir de una publicación de la cuenta oficial de la Copa del Mundo realizada semanas atrás en X (antes Twitter). La breve grabación muestra a Mbappé controlando un balón aéreo. Con un solo movimiento, Kiki dejó en el camino a Nahuel Molina, quien comenzó a correr a la espalda del atacante.
En ese instante, Thuram lanzó una pelota en profundidad a la ubicación del delantero y, en el fondo, se pudo capturar el preciso momento en que Molina lanzó la palabra “kiricocho”, con la intención de transmitirle malas energías a su rival y evitar el destino inexorable de esa jugada que señaló el 2-2 parcial.
La particularidad está lejos de ser una cuestión exclusiva del defensor que se desempeña en Atlético de Madrid. Marcos Acuña también había revelado un episodio similar ocurrido en la prórroga. El lateral izquierdo se refirió a la emblemática atajada del Dibu Martínez a Randal Kolo Muani en el último suspiro del alargue: “Justo estoy detrás de él cuando le pega y no me quedó otra que decir ‘kiricocho‘. Había quedado parado, mirándolo. Nos salvó el Dibu”.
Para esos momentos, Lionel Messi ya había marcado el 3-2 y Kylian Mbappé niveló todo para el 3-3 final en los 120 minutos. La historia se resolvió en los penales, instancia en la que hubo una tapada del Dibu a Kingsley Coman (Aurélien Tchouaméni mandó afuera el suyo).
El nacimiento de esa palabra como “maleficio” comenzó en la segunda etapa de Carlos Salvador Bilardo al frente de Estudiantes de La Plata, cuando se enteró de que había un aficionado, Kiricocho, que cada vez que se apersonaba en el club para presenciar una práctica sucedía “alguna desgracia”. Fue así que el técnico le dio la misión a este hincha de que fuera él quien recibiera a los equipos rivales. ¿El resultado? Estudiantes fue campeón del Torneo Metropolitano 1982 y solo perdió un partido como local, ante Boca, cuando Kiricocho no pudo acercarse al plantel del Xeneize.