El presidente de UFC, Dana White, ha vuelto a encender la llama de la controversia en el mundo de los deportes de combate, esta vez dirigiendo sus críticas al reciente enfrentamiento entre Mike Tyson y Jake Paul. Conocido por su tendencia a la polémica, no se contuvo al hablar sobre el evento en el que se impuso el YouTuber, 31 años menor que el ex rey de los pesados.
La lucha, celebrada en el estadio de los Dallas Cowboys, fue un éxito, aunque el show no pudo estar a la altura de las expectativas. El presidente de la UFC apeló a la ironía para apuntar contra el combate y el mítico boxeador.
“Mike Tyson tenía razón y yo estaba equivocado. Le dije: ‘Mike, básicamente tienes 60 años’. Él dijo: ‘¿De verdad crees que este maldito niño me va a hacer algo? No es bueno. No me va a noquear. No va a hacer esto’. Lo vieron, se tropezó cuando caminaba por el pasillo, le costó mucho subir las escaleras. Llevaba una rodillera y Jake Paul no podía hacerle nada. Ganó un montón de dinero y sé que la gente está enfadada porque se quedó en casa un viernes por la noche, pero todos tienen Netflix, nadie pagó por ello. Cuando Mike Tyson aparece, todo el mundo gana dinero. Mike Tyson es el mejor de todos. Tenía razón. Jake Paul no podía hacerle nada. Él tenía razón y yo estaba equivocado”, azotó.
En un análisis más detallado de la pelea, Iron Mike experimentó la primera derrota por decisión en su carrera, mientras Jake Paul hizo alarde de haber “perdonado la vida” al ex campeón mundial de los pesos pesados. White explicó: “Si no pensaban que así era como se desarrollaría la pelea, no sé qué esperaba la gente”.
El debate suscitado por White pone de manifiesto la rivalidad persistente entre estas disciplinas y cómo la UFC intenta posicionarse como el líder indiscutible del combate profesional. Desde el punto de vista de White, los récords de sus campeones son una prueba viva de la competencia interna que produce combates de mayor calidad, ya que es “raro que haya peleadores invictos dentro de esta industria”.
El titular de la UFC criticó la iniciativa de la pelea desde cuando fue anunciada, y siempre miró de reojo a Jake Paul, quien proviene del mundo del entretenimiento y desembarcó en el boxeo, dándole un nuevo impulso. De hecho, ya generó veladas de éxito ante estrellas de las artes marciales mixtas y desafió en las últimas horas a Conor McGregor.
Tyson, por su parte, hizo una lectura especial de la derrota. “Esta es una de esas situaciones en las que perdiste, pero aún así ganaste. Estoy agradecido por lo de anoche. No me arrepiento de haber subido al ring una última vez”, escribió en su cuenta de X (antes Twitter).
“Casi muero en junio. Recibí ocho transfusiones de sangre. Perdí la mitad de mi sangre y 25 libras (11,3 kg) en el hospital y tuve que luchar para recuperar la salud y poder pelear, así que gané”, se explayó sobre el brote de úlcera que sufrió en un vuelo a Los Ángeles, y que obligó a la postergación de la pelea, que en principio estaba pautada en julio.