Se habían conjugado muchas cosas en Montevideo antes del emocionante duelo que protagonizaron Uruguay y Colombia por la Fecha 11 de las Eliminatorias Sudamericanas. La Celeste, que había perdido en las semifinales de la Copa América contra su rival de turno, llevaba cuatro fechas sin ganar en medio de una crisis interna en la que el apuntado fue Marcelo Bielsa justamente por haber sido señalado por el ya retirado Luis Suárez y otros futbolistas del seleccionado charrúa. Por eso, el 3-2 que se registró al minuto 111 terminó siendo un desahogo total para el Loco y todo Uruguay.
“Los triunfos como el de hoy son sanadores. En el sentido que acercan mucho a todas las partes que están alrededor de un sentimiento tan fuerte como el de Uruguay. Fue un partido muy emocionante, se hizo muy evidente la garra que pusieron los jugadores para que el triunfo se conservara. Parecía imposible después de un empate faltando tan poco que volviera a desequilibrar. una alegria inmensa y como dije antes fue un triunfo muy necesario”, expresó en conferencia de prensa Bielsa.
Colombia se fue al descanso 1-0 por el tanto de tiro libre de Juanfer Quintero, pero los dirigidos por el entrenador argentino torcieron la historia en el complemento con los tantos de Davinson Sánchez (en contra) y Rodrigo Aguirre. Sin embargo, Andrés Gómez anotó el empate parcial a los 96 y, cuando parecía que no habría tiempo para más, Manuel Ugarte apareció de forma heroica para dejar los tres puntos en casa y dejar a la Celeste en la segunda colocación de la clasificatoria para el Mundial 2026.
“Para nosotros era imprescidible volver a ganar y más allá de la forma en la que se dio que fue muy emocionante. Era un triunfo muy necesario”, aportó Bielsa, quien luego hizo un análisis más frío sobre la acción en el estadio Centenario. “No imaginé así el partido porque siempre me los imagino manejando la pelota y recuperándola rápido. Nos costó mucho evitar que Colombia tuviera posesiones largas. Ellos son un equipo que tiene una forma de jugar muy aceitada y lograda, que defiende, presiona, maneja la pelota y tiene desequilibrio.Todas esas cosas lo hacen un rival muy difícil de vencer. Preparamos el partido para que no tuvieran la pelota los centrales de ellos y fueron los que más la tuvieron”, detalló.
Más tarde, redondeó su visión analítica: “Defendimos muy bien, cuando logramos pasar de nuestro campo al campo rival con la pelota por bajo, fundamentalmente sacándola de derecha a izquierda o al revés, construimos algunas acciones de ataque como las que perseguimos. Después nos aferramos al resultado y nos costó ir a campo rival, pero el dominio fue alternado y, en cuanto al peligro, nosotros tuvimos algunas ocasiones bien logradas aparte de los tres goles”.
Su conclusión final fue: “En un partido parejo, con la posesión superior de ellos y más peligrosidad nuestra, alternando el trámite y el manejo del partido, yo creo que el triunfo fue merecido”.
Finalmente, Bielsa le dedicó unas palabras a Rodrigo Aguirre, nueva carta de los uruguayos: “Hace bastante tiempo que vengo siguiendo sus actuaciones. Logró la titularidad en el América en los últimos dos o tres meses y eso no es sencillo en un club tan importante como ese. Compartía el ataque con el 9 de la selección de México y eso yo lo vinculé para acercarlo a Darwin (Núñez). Para tener un poco más de fortaleza ofensiva, me pareció un jugador desequilibrante”.
Da la sensación de que en Uruguay se empezó a acomodar la estantería después del cimbronazo que se generó por las disputas entre el cuerpo técnico y el plantel. El próximo martes, la Celeste jugará como visitante de Brasil en Salvador de Bahía (arrancará 21:45) y buscará dar un paso más hacia la clasificación mundialista que ya acaricia junto a argentinos y colombianos.