Jake Paul y Mike Tyson se preparan para un enfrentamiento singular en el mundo del boxeo. Este viernes por la noche, el AT&T Stadium en Arlington, Texas, será el escenario de una pelea que ha captado la atención de millones de personas. Jake Paul, un influencer de 27 años que ha incursionado en el boxeo, se enfrentará al legendario ex campeón de peso pesado Mike Tyson, de 58 años. Este combate será transmitido de manera gratuita para los casi 300 millones de suscriptores de Netflix, marcando un hito en la programación en vivo de la plataforma de streaming.
El enfrentamiento generacional es parte de las ambiciones crecientes del servicio de streaming para la programación en vivo. También pondrá a prueba el conocimiento de los fanáticos: algunos vieron a Tyson dominar la división de peso pesado en la década de 1980, mientras que otros siguieron en línea cómo Paul se catapultó a la fama a fines de la década de 2010.
Jake Paul, originario de Ohio, comenzó su carrera en las redes sociales con videos en Vine y luego en YouTube, donde ganó notoriedad por sus acrobacias y contenido controvertido. En 2015, fue contratado por Disney Channel para un papel en la serie “Bizaardvark”, pero su relación con la cadena terminó en 2017 tras una serie de incidentes. Paul ha logrado un récord de 10-1 en el boxeo profesional, aunque sus oponentes han sido principalmente figuras de las artes marciales mixtas que se han adaptado al boxeo. Tiene 27 millones de seguidores en Instagram.
En 2020, Paul, quien afirmó que la pandemia de coronavirus era un “engaño”, organizó una gran fiesta en su casa de Calabasas, California, que no respetó el distanciamiento social ni las órdenes de uso de mascarillas, lo que provocó la condena pública del alcalde de la ciudad. Más tarde, ese mismo verano, el FBI allanó su casa casi dos meses después de que lo acusaran de delitos menores por entrar en un centro comercial de Scottsdale, Arizona, que estaba siendo saqueado. Los cargos finalmente se retiraron y la redada no dio lugar a cargos federales. En 2021, Justine Paradise, una influencer de TikTok de 24 años, acusó a Paul de agresión sexual . “Esta acusación contra mí es 100% falsa”, dijo en un comunicado en ese momento.
Por su parte, Mike Tyson es conocido por su impresionante carrera en el boxeo, donde se convirtió en el campeón de peso pesado más joven a los 20 años. Tyson se retiró del boxeo profesional en 2005, pero ha participado en combates de exhibición desde entonces. Además de su carrera deportiva, Tyson ha incursionado en el entretenimiento, apareciendo en películas como “The Hangover” y participando en eventos de World Wrestling Entertainment.
Ambos boxeadores han estado envueltos en controversias. Paul ha enfrentado críticas por sus declaraciones sobre la pandemia de coronavirus y por incidentes legales, mientras que Tyson cumplió una condena de prisión de tres años en la década del 90 luego de ser hallado culpable de violación contra una participante de un concurso de belleza. Además, ha enfrentado otras acusaciones legales recientes.
En el año 1996, Tyson perdió una pelea ante Evander Holyfield de manera sorpresiva; el árbitro detuvo la pelea cuando Holyfield asestó una andanada de golpes en el undécimo asalto después de aturdir a Tyson en el décimo. En una revancha al año siguiente, Tyson fue descalificado por morder dos veces las orejas de Holyfield durante intercambios a corta distancia. La licencia de boxeo de Tyson fue revocada temporalmente y fue multado con 3 millones de dólares.
A pesar de sus pasados tumultuosos, que se extendieron incluso hasta el pesaje previo con una bofetada de Tyson contra Paul, ambos han logrado mantener una presencia significativa en el mundo del entretenimiento y el deporte.
Este combate no solo representa un choque generacional, sino también un experimento en la evolución del boxeo como espectáculo mediático. La pelea entre Paul y Tyson es un reflejo de cómo las plataformas de streaming están transformando la manera en que se consumen los eventos deportivos, atrayendo tanto a fanáticos del boxeo tradicional como a nuevas audiencias interesadas en las personalidades de las redes sociales.