Los días del PSG son difíciles. Acechado por el Mónaco en la Ligue 1 (ambos equipos comparten la cima del campeonato doméstico con 20 unidades) y de presente irregular en la Champions League (se ubica en el puesto 19 de la zona Liga tras vencer al Girona 1-0, perder con el Arsenal 2-0 y empatar 1-1 con PSV); en las últimas horas se confirmó que la comisión paritaria de recursos de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) francesa fallará a favor de Kyllian Mbappé sobre el litigio financiero que mantiene la estrella que actualmente se desempeña en el Real Madrid y deberá abonarle 55 millones de euros de salarios y primas adeudados.
Ambas partes presentaron sus argumentos el pasado martes, en medio de un gran ruido mediático después de que el nombre del futbolista apareciera vinculado a una acusación de violación en Estocolmo, que tanto el delantero como sus abogados relacionaron con una maniobra de distracción del club para empañar su imagen en el contexto de este litigio.
La comisión paritaria de recursos recibió el caso después de que en primera instancia la comisión jurídica diera la razón al jugador e impusiera el pago de esa suma al PSG, que presentó una apelación.
La institución de la capital francesa considera que tenía un acuerdo verbal con Mbappé para no pagarle esos 55 millones si abandonaba gratis París al final de la pasada temporada, algo que hizo para firmar por el Merengue.
La estrella campeona del mundo en la edición de Rusia 2018 había firmado en 2022 una prolongación de dos años de su contrato con el PSG, más una temporada suplementaria. Poco antes de que acabara el segundo año, hizo saber que no quería activar esa cláusula para un tercer año, lo que motivó a que el club le lanzara un ultimátum: o renovación o salida del club ese mismo verano (europeo) de 2023. Para presionarle, lo apartó del plantel profesional, del que acababa de hacerse cargo Luis Enrique.
Para desbloquear la situación y permitirle al goleador volver a trabajar a la par de sus compañeros, tanto el club como el jugador aseguraron que habían llegado a un acuerdo para que su salida no se produjera sin dejar dinero en las arcas parisienses. Para el PSG, ese acuerdo concierne a esos 55 millones, pero Mbappé considera que el pacto quedó caduco y contenía cláusulas ocultas.
La decisión de la comisión paritaria de recursos, en la que hay representantes de los clubes y de los futbolistas, además de magistrados laborales, no será el último escalón en el litigio, dado que ambas partes podrán apelar a instancias superiores.
El siguiente recurso acabaría en la Comisión Superior de Apelación, que depende de la Federación Francesa de Fútbol (FFF), antes de que el caso pueda llegar hasta el Comité Olímpico y Deportivo de Francia (CNSOF, que tiene una instancia de resolución de conflictos) o incluso en la justicia ordinaria. Lo cierto es que en La Ciudad de la Luz dan por hecho que Kiki tiene 55 millones de razones para celebrar.
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