El estreno de Fernando Gago como director técnico de Boca Juniors no fue el esperado, ya que su equipo perdió 3-0 en su visita a Tigre. El encuentro, correspondiente a la fecha 18 de la Liga Profesional tuvo jugadas que desataron algún reclamo por parte de ambos conjuntos.
Uno de las primeras polémicas surgió en el área del Matador a los 19 minutos del primer tiempo, cuando el defensor Ramón Arias extendió su brazo, que hizo contacto en el rostro de Edinson Cavani. El delantero uruguayo cayó al suelo y reclamó un golpe intencional de su rival. Sin embargo, el árbitro Fernando Echenique no observó ninguna infracción y, con buen criterio, dejó seguir el partido ya que se trató de un forcejeo normal de un partido de fútbol.
Más tarde, sobre los 28 minutos, llegó el primer estallido en el estadio José Dellagiovanna de Victoria con el gol de Nehuén Paz. El defensor de Tigre remató desde el suelo y tras un leve desvío, la pelota se metió por encima de la humanidad de Chiquito Romero. Los jugadores de Boca protestaron una mano intencional del jugador que marcó el tanto del 1-0.
El balón efectivamente impacta en el brazo de Paz, pero se considera que es una mano que acompaña el movimiento corporal y golpea en forma accidental en la zona prohibida. En consecuencia, no se considera una infracción. Una vez más, la decisión de Echenique fue acertada.
* El segundo gol de Tigre de Cardozo en el que se reclamó un fuera de juego
Del lado del local también se vio una protesta del técnico Sebastián Domínguez luego de la invalidación del tanto de Blas Armoa por posición adelantada. El delantero paraguayo, quien reemplazó al lesionado Florián Monzón estaba en offside antes de mandar la pelota al fondo de la red.
Sobre los 85 minutos, llegó la segunda conquista del cuadro matador y otra vez debió intervenir el VAR con el trazado de líneas para determinar si existió un posible fuera de juego de Agustín Cardozo, quien terminó empujando la pelota para marcar el 2-0. Luego de unos minutos de revisión, Echenique dio por válido el tanto, ya que el autor del tanto se encontraba en la misma línea que el último defensor de Boca.
Por último quedó el 3-0 de Tigre, obra de Sebastián Medina, quien también partió habilitado al recibir la asistencia y someter con un potente disparo a Sergio Romero. En líneas generales, Echenique cumplió una correcta labor en conjunto con sus colaboradores.
* El resumen de Tigre-Boca