Miguel Ángel Russo sigue tallando su historia viviente en el fútbol argentino y será el nuevo director técnico de San Lorenzo. El Ciclón oficializó su llegada en un momento clave para el club, que está atravesando una situación delicada desde lo futbolístico y se encuentra cerca de la zona del descenso (eliminada este temporada en la última Asamblea de la AFA), algo que no pudo revertir con Leandro Romagnoli al mando del banco de suplentes.
Después de terminar su quinto ciclo como DT de Rosario Central, el estratega de 68 años afrontará su segundo ciclo al mando del Ciclón, tras su paso por la institución en el año 2008, donde estuvo cerca de salir campeón. “Uno busca siempre lo mejor, lo que crea conveniente. Lo venimos hablando, es un momento con muchos lesionados es lo que más me preocupa. Y con lesiones que son largas, el plantel quedó muy tocado pero son cosas que hay que retocar. San Lorenzo es un club grande y hay que pensar hacia adelante. Se tiene que levantar, me ha pasado muchas veces, y la forma es trabajar. Pero lo más importante es que tenemos que trabajar, ya nos metimos bastante en lo que viene. Siempre pensando en lo mejor”, reflexionó Russo en el arranque de la conferencia de prensa.
Por su parte, comentó sobre su decisión de elegir al club de Boedo como su nuevo destino, más allá de todas las controversias y polémicas en las que está envuelto el club y la dirigencia, sumado a lo ocurrido en el entrenamiento del día miércoles cuando los barras bravas tuvieron un cara a cara con los jugadores. “Fue una decisión del club y mía. Me fueron a buscar y este fue el momento en el que uno sabe cómo están los clubes. Hay que trabajar mucho en esta etapa. Estoy contento de estar acá otra vez”, aclaró.
Miguel ya tuvo la oportunidad de evaluar el nivel anímico de sus dirigidos en la primera práctica que tuvo en la mañana. “Al plantel lo encontré bien, estuvimos hablando de las cosas elementales. Contentos con el trabajo de hoy. Este es el arranque, tenemos que seguir; es una época difícil. Es el final del año. Las cosas para mejorar van a ir desde lo técnico y lo táctico y después la cabeza de los chicos. Estamos enfocados puramente en eso”, comentó.
“Todos arrancan de cero. En el buen sentido de la palabra, esto es así. Tenemos muchos lesionados, es un plantel muy corto. Necesitamos de todos. Esta necesidad tampoco tiene nada que ver, habrá que ver lo mejor de todos”, siguió su comentario sobre la situación del vestuario. A esto, le sumó el momento del fútbol argentino: “Tengo muy claro todo lo que hablamos. Siempre se piensa en el próximo partido, que es un rival que respeto. Todo el momento es competitivo en el fútbol argentino. No hay un rival simple. Hay que mirar hacia delante de forma positiva para buscar lo mejor para el club y los jugadores”.
El oriundo de Lanús llega al Ciclón después de firmar una de sus mejores etapas con el Canalla, en donde se consagró campeón de la Copa de la Liga 2023 al vencer en la final a Platense. A pesar de eso, el nivel del equipo comenzó a decaer en los últimos partidos y decidió irse, más allá de las especulaciones sobre alguna enfermedad, algo que se encargó de desmentir. “Yo entendí que me tenía que ir, porque era el momento. Nunca dije que tenía otro tipo de cosa o situación. Yo siempre me dedico a mí, en todos mis aspectos y mi forma. Es a lo que me dedico y es lo que más me gusta, lo disfruto”, explicó.
Además, habló sobre sus ambiciones personales y cuáles son sus expectativas de cara a su nueva etapa en San Lorenzo. “Las aspiraciones son siempre las mismas, las más altas. El esfuerzo y el trabajo de todos sirven para llegar a lo más alto. Hay que permanentemente estar atento. A veces se te dan con más tiempo, a veces es muy corto. En mi última etapa en Rosario Central, en un momento muy delicado me tocó ser campeón”, aseveró.
Por su parte, también habló sobre las exigencias del público y cómo reaccionará a su vuelta, más allá de que se mostró contento con el cariño que recibió en las redes. “A la gente de San Lorenzo no se le pide nada, ya tuve experiencia y yo sé que está. Hay que responderles y nada más”, argumentó.
Miguel Ángel Russo se hará cargo de un cuadro que está en completa caída, ya que ganó solo un partido de los últimos cinco en juego y se ubica a solo ocho puntos de Tigre, último en la tabla general. Por su parte, el primer desafío que tendrá en el banco del Cuervo será el domingo 20 de octubre a las 19:30, cuando reciba en su casa a Barracas Central.