La selección argentina vapuleó 6-0 a Bolivia en el Monumental con tres goles de Lionel Messi, figura estelar del match, y los tantos de Lautaro Martínez, Julián Álvarez y Thiago Almada. A la Albiceleste le salió todo en una noche redonda que sirvió para retomar el camino de la victoria tras la derrota ante Colombia y el empate con Venezuela.
Lógicamente una goleada de esta talla hizo que los puntajes estén muy por encima del aprobado, con un 10 superlativo para el capitán, pero también con varios futbolistas que lo acompañaron y lo llevaron a optimizar su juego. Lionel Scaloni brindó otra masterclass pese a las falencias del rival de turno, mientras que hasta los relevos se lucieron con altos puntajes.
EL BOLETÍN DE CALIFICACIONES
Gerónimo Rulli (7): Prácticamente sin trabajo, atrapó sin problemas un cabezazo en el primer tiempo. Redondeó una buena doble fecha de Eliminatorias y dejó claro que hay reemplazo en caso de que falte Dibu Martínez.
Nahuel Molina (8): Incansable por la banda derecha, como si no le hubiera pesado nada haber sido uno de los jugadores con más metros recorridos en Maturín. Tuvo oxígeno para ir siempre, como en el cuarto gol en el que llegó al fondo y envió el centro atrás para Thiago Almada. Sin problemas en el retroceso. Volvió a mostrar su mejor nivel.
Cristian Romero (7): Probablemente uno de los encuentros en los que menos haya tenido que transpirar desde que viste la camiseta albiceleste. Sirvió para sumar rodaje tras su ausencia en Venezuela. Garantía en la última línea como es habitual.
Nicolás Otamendi (8): Convincente performance de un marcador central que invita a pensar que participará con la Scaloneta asiduamente en 2025. Firme abajo, con algunos bloqueos ante remates que lo hicieron ver impasable, también ganó en el área ajena: le anularon un gol por una finísima posición adelantada pasiva de Tagliafico. Le dejó su lugar a Lisandro Martínez a los 72′.
Nicolás Tagliafico (7): Probablemente el tipo más regular de la Scaloneta. No descollará, pero el DT sabe que tiene cubierto el lateral izquierdo con un futbolista que aporta marca, se repliega cuando es necesario y también abre espacios con sus proyecciones. Extra: ganó de cabeza en el área rival. La mala: intervino en lo que era el cuarto gol de Otamendi, finalmente anulado.
Rodrigo De Paul (7): Otro buen partido de un hombre hecho para la Selección. Entrega, despliegue, sacrificio y juego ya son monedas corrientes en cada aparición. Tal vez sin tanto protagonismo en ataque en esta ocasión, pero siempre presente. Salió a los 64′ para darle lugar a Exequiel Palacios.
Enzo Fernández (8): Volvió a realizar una buena tarea y parecerse al de su mejor versión en la Selección. Scaloni lo respaldó manteniéndolo todo el partido, algo que necesitaba para su confianza. Rueda de auxilio en el mediocampo, se complementó a la perfección con De Paul y Mac Allister, al que relevó cada vez que pasó al ataque. Es vital que esté enfocado y Argentina gana un plus con sus buenas actuaciones.
Alexis Mac Allister (8): Excelente reaparición del jugador del Liverpool, que venía de ausentarse ante Venezuela por molestias físicas. Jugó de interno y luego de volante central, aunque siempre tuvo entre ceja y ceja el arco rival. Con un zapatazo tremendo casi clava el cuarto en el segundo tiempo. Vital para el juego y conexión entre líneas. Scaloni lo cuidó y reemplazó por Leandro Paredes a los 64′.
Lionel Messi (10): Amo y señor del partido. Rejuvenecido, como en sus mejores épocas, exhibiendo su físico privilegiado que lo hace estar a tono en el fútbol de elite aun con 37 años. Definición certera para el 1-0 tras la recuperación de Lautaro y habilitaciones magistrales para el segundo y tercero del Toro y Julián Álvarez. Ya en el segundo tiempo, otro gol de derecha tras recibir como enganche y burlar marcas con suma facilidad. Y, sobre el final, combinación con Nico Paz (como si se conocieran de toda la vida) y zurdazo al primer palo para redondear la goleada histórica. Un partido que invita a soñar con su presencia en el Mundial 2026.
Lautaro Martínez (9): Presente en los momentos justos. Cuando parecía que Bolivia hallaba salida limpia desde el fondo, desconfió del rival, presionó a Luis Haquín y recuperó la pelota que dejó mano a mano a Messi con el arquero para el 1-0. En el segundo, acompañó a Messi a la espera de un rebote y tuvo premio: el 10 lo asistió y la empujó para el segundo de Argentina. Importante para él sumar la cuota goleadora de la que siempre está pendiente. Reemplazado por Nico Paz a los 72′.
Julián Álvarez (9): Espectacular actuación coronada con un golazo. Ubicado por la izquierda del ataque, aportó desmarques, se conectó con Messi y -como es habitual- se sacrificó en el retroceso. Uno de los que nunca “deja tirado”. Primero asistió al rosarino con un pase en profundidad brillante. luego, con un arranque, le marcó el camino de la asistencia al 10: con su control y definición liquidó el pleito en la última jugada del primer tiempo. Sustituido a los 64′ por Thiago Almada.
Lionel Scaloni (10): Le salió todo lo planificado. Mantuvo la base del empate en Maturín y apostó por el tridente ofensivo que ganó el partido en el primer tiempo (todos goles y asistencias entre ellos). En el complemento, aprovechó para rotar el equipo y encontró más soluciones con Paredes (construyó la asistencia de Molina en el cuarto tanto), Almada (sentenció ese 4-0) y Nico Paz (debutó y asistió a Messi en el último tanto). Otro aprobado con creces para el líder de la Scaloneta.
Exequiel Palacios (7): Reemplazó a De Paul a lo 64′. Jugó con la naturalidad que lo caracteriza, dentro de un contexto ampliamente favorable. Es positivo que haya sumado minutos porque es una pieza importante de recambio en la visión del cuerpo técnico.
Leandro Paredes (8): Ocupó el lugar de Mac Allister desde los 64′. Al margen de oxigenar el mediocampo y ser partícipe de la circulación tan necesaria para ejecutar la idea de Scaloni, se lució con un pase largo que abrió a la defensa boliviana y derivó en la asistencia de Molina y gol de Almada (4-0). Muy bien.
Thiago Almada (8): Sustituyó a Julián a los 64′ y se quitó la espina de no haber podido jugar en condiciones normales en Maturín cuando fue titular. A los pocos minutos de saltar al campo, sentenció el partido con su aparición en el área para empujar el buscapié de Molina. Desahogo para uno de los campeones del mundo que forman parte del recambio necesario en la Albiceleste.
Lisandro Martínez (-): Entró por Nico Otamendi a los 72′. Hizo lo que pedía cada jugada y mostró solvencia pese al poco trabajo.
Nicolás Paz (-): Ingresó a los 72′ por Lautaro. Unos minutos para darse el gusto de debutar en la Selección absoluta y, nada menos, darse el gusto de darle una asistencia a Messi en el sexto gol.