El clásico de Madrid tuvo una versión efervescente: el Atlético y el Real igualaron 1-1 en el Civitas Metropolitano, en un duelo que estuvo 20 minutos detenido por incidentes. Eder Militao abrió el marcador para la visita y el festejo de la conquista convocó al caos. Luego, en el cuarto minuto de descuento, Ángel Correa, con una gran acción individual, puso cifras definitivas. Pero las tensiones continuaron en los micrófonos, tal como lo dejó claro Diego Simeone.
Militao marcó el primer gol en el minuto 64 del derbi desencadenando los conflictos que obligaron a interrumpir el partido. Tras el tanto del brasileño, que llegó gracias a una asistencia de Vinicius Junior tras un tiro libre cobrado rápidamente por Luka Modric, el guardameta madridista Thibaut Courtois provocó a la hinchada local con gestos de cara a la tribuna. Vale recordar que defendió la valla del Colchonero antes de desembarcar en el Merengue.
La respuesta de los seguidores rojiblancos no se hizo esperar: desde la grada del fondo sur comenzaron a lanzar objetos hacia el campo. El ambiente se tensó rápidamente y jugadores de ambos equipos se involucraron. Mientras algunos futbolistas del Real Madrid, como Vinicius Jr., se mezclaron en la agitación, sus compañeros Antonio Rüdiger y Luka Modric, junto con el técnico Carlo Ancelotti, retiraron a los suplentes para evitar una escalada mayor.
En ese momento, tanto Simeone como los jugadores del Atlético se dirigieron a la zona de conflicto. El técnico argentino y el defensor José María Giménez se acercaron a la tribuna para dialogar directamente con algunos de los hinchas, quienes llevaban máscaras para no ser identificados y eludir posibles sanciones. Con gestos de calma, intentaron contener la situación y evitar que el encuentro se suspendiera de forma definitiva.
Sin embargo, el árbitro del encuentro, Mateo Busquets Ferrer, quien debutaba en un clásico madrileño a sus 30 años, tomó la decisión de mandar a los jugadores de ambos equipos a los vestuarios mientras la situación se controlaba. Después de una pausa de varios minutos, y tras advertir que cualquier nuevo episodio de violencia significaría la suspensión permanente del partido, el juego se reanudó bajo un clima de tensión latente.
Pues bien, el Cholo Simeone protagonizó una áspera conferencia de prensa post partido. Es que, al ser consultado por los incidentes, señaló a los ultras que lanzaron proyectiles, pero también habló del comportamiento de los protagonistas, haciendo foco en el portero que supo tener bajo su tutela.
* La secuencia de los incidentes en el Civitas Metropolitano
“Tenemos que ayudar todos”, remarcó. “La gente que ha tirado los mecherazos no está bien, pero tampoco ayudamos nosotros los protagonistas cuando subestimamos a la gente, cargamos a la gente, y provocamos a al gente. Claro, la gente se enoja. Nosotros, los protagonistas, también tenemos que buscar la calma, entender las situaciones. Uno puede festejar el gol, pero no festejándolo mirando a la tribuna, cargando contra la afición, haciéndolo gestos así porque la gente luego se enoja”, apuntó directamente contra el belga, sin mencionarlo.
“Claro que no se justifica, pero tampoco se justifica lo inicial. No está bien, pero nosotros somos los que provocamos estas situaciones. La gente no se enoja sola, la gente se enoja por algo. Y nosotros ayudamos a que la gente se enoje. Con la gente que ha cometido esos incidentes, el club tendrá que tomar una decisión. No necesitamos de esa gente. Pero, cuidado, porque también podemos empezar a sancionar a los protagonistas, que también cargamos a esa gente. Y cuidado con lo que generamos, porque yo me incluyo. Para mí, sanción al que provoca. No viene más. Sanción al del mechero y también al que carga. Y eso equilibra. Como no se sanciona, esto sigue”, concluyó el DT, de 54 años.
* Las principales acciones del derbi