El condimento especial del Superclásico entre River y Boca arrancó unas semanas atrás, con un tira y afloja que cambió el día del partido del domingo al sábado. En el día de la primavera, La Bombonera se tiño de fiesta con un recibimiento que costó $100 millones y terminó con un tenso cruce entre Sergio Romero y los hinchas en la platea. Dentro de la vorágine de situaciones en el encuentro que el cuadro de Núñez venció por 1 a 0 con gol de Manuel Lanzini ,se destacan tres perlas: el cruce entre Cristian Lema y Franco Armani, la curiosa charla de Marcelo Gallardo con Nicolás Ramírez y el festejo del DT en el gol anulado.
La calma se empezó a cortar antes de que sonara el pitazo inicial del árbitro del encuentro, Lema rememoró su pelea con Armani del primer enfrentamiento entre ambos en el Más Monumental. En el saludo protocolar en la salida de los jugadores al campo de juego, el central le negó el saludo al arquero que estiró mano y solo lo miró a los ojos. Esta disputa se arrastra desde del empate 1 a 1 en febrero de 2024, cuando el campeón del mundo le pegó un cortito en las costillas al ex futbolista de Lanús en frente de Yael Falcón Pérez, autoridad principal aquel día. “Cornudo, ¿qué me pegas?”, respondió enfurecido el número dos del Xeneize increpando al dueño del arco millonario. El defensor terminó viendo la cartulina roja por parte del árbitro y se perderá la próxima fecha contra Belgrano.
Unos minutos después, con nueve segundos en el reloj, Federico Gattoni se ganó la tarjeta amarilla más rápida de la historia del clásico tras una dura entrada sobre Edinson Cavani. Marcos Rojo realizó una entrada similar pero, en esta ocasión, el colegiado decidió no sacar a relucir su brazo en alto. Estas jugadas comenzaron a generar una malestar en Gallardo y, sumado a las amonestaciones de Santiago Simón y Facundo Colidio antes del entretiempo, el entrenador de River fue de lleno a buscar a las autoridades tras el silbatazo que marcó el final de los primeros 45′.
El Muñeco le bajó la intensidad a los jugadores y le habló a Ramírez en tono irónico en medio de las distintas quejas. “Vamos al vestuario. Dale, vamos al vestuario”, exclamó el director técnico mientras gesticulaba con sus manos y apartaba a sus futbolista. “Me pongo en el lugar de los jugadores y entiendo muchas cosas que suceden, que a veces te dejan con algun dejo de injusticia. Hubo condicionantes, pero bueno, en todo caso creo que había que abstraerse de eso y eso es lo que hicieron los jugadores. Tuvimos que hacer algunos recortes por como se presentó el partido, pero estuvimos muy comprometidos con el planteo, el juego y cuando tuvimos que defender, defendimos con mucho carácter, y eso me gusta, y mucho, que un equipo pueda sostenerse de la manera que lo hicieron”, subrayó el DT post partido sobre la situación.
La expectativa se sostuvo hasta el último instante del cotejo. Milton Giménez marcó un gol en el tiempo compensatorio del segundo tiempo y desató la euforia en La Bombonera. Pero la incertidumbre invadió el verde césped a raíz de un llamado del VAR a Ramírez. El delantero de Banfield tocó la pelota con la mano antes de que cruzara la línea de cal y el tanto debía ser anulado. El árbitro del encuentro tuvo que soportar a la multitud y la zona de capitanes desbordada para tomarse el tiempo de revisar la jugada.
Gallardo fue de los pocos que mantuvo la calma en los minutos críticos, ya que estaba convencido de que el tanto era ilegal y les pedía a sus dirigidos que dejaran de quejarse para que pudiera concretarse el veredicto. Pero el temple del Muñeco se disolvió en el momento en el que el réferi cobró la infracción del nueve de Boca: allí el entrenador de River festejó con vehemencia la situación y gritó “goool”.
El Superclásico se vistió de rojo y blanco y el cuadro de Núñez llegará entonado de cara al choque por los cuartos de final de la Copa Libertadores contra Colo Colo, que se jugará el día martes a partir de las 21.30, después de la igualdad 1 a 1 en Chile. El Millonario escaló varias posiciones en la Liga Profesional y se estableció en la parte alta de la tabla anual. Por su parte, el conjunto de La Ribera no se pudo prender en la pelea -se ubica en la posición 11° con 21 unidades- y Martínez se retiró cabizbajo de la cancha.