Argentina perdió ante Alemania por 5-1 en un encuentro correspondiente a los octavos de final del Mundial Sub 20 femenino celebrado en Colombia. Luego de hacer historia al avanzar por primera la fase de grupos, la Albiceleste se enfrentó ante una de las favoritas del torneo que se puso en ventaja con dos goles de Sophie Nachtigall y los restantes de Mathilde Janzen, Loreen Bender y Zicai (23′ST).
El equipo de Christian Meloni no pudo hacer pie ante el poderío germano y para colmo sufrió la baja de su máxima figura, Kishi Núñez. A poco del final del primer tiempo, la delantera de Boca Juniors se lesionó la rodilla y debió ser sustituida por Juana Fonseca. Al instante, Kishi rompió en llanto y tuvo que ser consolada por sus compañeras.
La situación fue tan dramática para la joven futbolista de 18 años que generó una reacción espontánea de una jugadora alemana, quien se acercó e intentó levantarle el ánimo. Asimismo, Mathilde Janzen la abrazó y la acompañó hasta fuera del campo de juego, mientras la consolaba. No obstante, pocos segundos después, Delfina Lombardi logró marcar el único gol argentino tras aprovechar un error defensivo rival. El tanto de Lombardi llegó en el minuto 42, y le brindó un momento de esperanza a la Albiceleste de cara al complemento.
Además, el encuentro estuvo marcado por la polémica, ya que al término del primer tiempo, la árbitra determinó que no era necesario revisar una jugada confusa con el VAR, en la que Laura Gloning despejó un balón sobre la línea de gol, que pareció haber traspasado la misma. Esta decisión generó protestas, aunque no se solicitó la intervención de la tecnología desde el banco argentino.
Alemania también enfrentó su propia controversia en el segundo tiempo. A los 48 minutos, tras una solicitud del equipo alemán, la árbitra revisó una supuesta falta de Luciana Pérez sobre Cora Zicai en el VAR pero decidió no sancionar la jugada como penal. Además, se añadieron siete minutos de tiempo extra al final del encuentro. Alemania dominó gran parte del partido y, a pesar de algunos intentos fallidos como el cabezazo de Alara Sehitler, su superioridad fue evidente.