El reloj indicaba poco más del primer cuarto de hora en el Estadio Malvinas Argentinas de Mendoza cuando Brian Aguirre le ganó la posesión de la pelota a Kevin Mantilla e irrumpió dentro del área para definir ante la salida de Guido Herrera. Boca Juniors firmaba el 1-0 ante Talleres de Córdoba en el duelo de cuartos de final de la Copa Argentina, pero también se abría una enorme polémica: la pelota salió en la previa al remate rasante del delantero xeneize.
El ex atacante de Newell’s no le hizo falta al defensor colombiano, pero sí se aprovechó de una situación que debió derivar en un saque de arco a favor de la T. Quien más mostró su disconformidad por lo sucedido fue el capitán Herrera, que visualizó desde el arco que la pelota había salido en su totalidad, algo que se confirmó con las distintas repeticiones que expuso la televisación oficial.
Hay que recordar que para que se considere que el balón abandonó los límites, debe cruzar la totalidad de la línea. “El balón no estará en juego cuando haya atravesado completamente la línea de meta o de banda, ya sea por el suelo o por el aire”, indica en un fragmento la Regla 9 de la International Football Association Board (IFAB). Ni el árbitro principal, Andrés Merlos, ni los jueces de línea Pablo Gualtieri (ubicado en el lateral opuesto) y Yamil Bonfá, divisaron que el esférico estaba afuera cuando Aguirre lo recuperó.
Hay que recordar que la Copa Argentina no tiene disponible el VAR, como sí está en todos los partidos de la Liga Profesional fecha a fecha y por eso el juez no pudo corroborar en las cámaras la acción de la polémica. Sin la asistencia de la tecnología, en este caso el peso de la responsabilidad cae en Merlos, que era el integrante de la terna arbitral mejor posicionado en ese momento.
Fue apenas unos segundos después de esta falla que derivó en el gol de Boca que llegó el empate de Talleres de Córdoba por intermedio de un remate cruzado del ex River Federico Girotti, cuando ya se afrontaban 19 minutos de actividad de la etapa inicial.
Si bien hubo distintas incidencias que se reclamaron de un lado y otro, en el Xeneize mostraron su disconformidad por el offside que le pitaron a Milton Giménez a los 78 minutos en una acción que, segundos después de que levantara la bandera el línea, terminaba con una anotación de Jabes Saralegui luego de un pase del Changuito Exequiel Zeballos. En el conteo final del encuentro, Merlos repartió cinco amarillas (2 a jugadores de Talleres y 3 a los de Boca).
Finalmente, el duelo derivó en una extensa tanda de penales que vio a Boca celebrando el boleto a cuartos de final donde se topará con Gimnasia y Esgrima La Plata.