En una evento que ha acaparado la atención del mundo, Mike Tyson y Jake Paul se preparan para enfrentarse el próximo 15 de noviembre en el AT&T Stadium de Arlington, Texas. Esta anticipada pelea ha provocado numerosas opiniones de fanáticos, especialistas y analistas, especialmente por el contraste de edades entre ambos pugilistas: La leyenda de 58 años (retirado desde 2005) y el joven youtuber de 27.
En las últimas horas, el que se subió al ring mediático fue Hulk Hogan, la icónica figura de la lucha libre que ha manifestado su preocupación por la salud de Mike Tyson. El combate, que será transmitido por la plataforma virtual Netflix, ha despertado gran interés en todo el planeta, pero también ha generado una constante inquietud entre los más cercanos a Iron Mike.
Durante su participación en el popular podcast Impulsive, conducido por Logan Paul, hermano de Jake Paul, el ex luchador expresó abiertamente sus temores sobre los posibles riesgos que este espectáculo podría implicar para el legendario boxeador. “Tu hermano es demasiado fuerte, hermano”, comentó Hulk Hogan, dejando entrever su ansiedad ante la posibilidad de que la fuerza del retador pueda poner en peligro la salud de Tyson.
Logan Paul corroboró las preocupaciones del personaje mediático, destacando el riguroso entrenamiento de su hermano menor y la evolución de su técnica. “En serio, y ahora tiene una mano izquierda que parece estar disparando”, señaló en referencia a la nueva y poderosa habilidad de Jake, que ha sido perfeccionada durante meses de preparación intensiva.
El personaje característico por sus apariciones en los medios con su melena rubia y sus largos bigotes ha seguido de cerca la carrera de Tyson. Además, ha sido testigo de su ferocidad en el ring, no ocultó su angustia: “Amo a Mike hasta la muerte. No quiero que él (Jake Paul) mate a Mike”. Una mirada que marca un cambio en la postura del ex luchador, quien anteriormente se había mostrado confiado en las capacidades de Tyson.
En junio de 2024, Hogan había expresado su apoyo incondicional al legendario púgil, minimizando los recientes problemas de salud del ex campeón mundial de boxeo. “Cuando se concentre, buscará y destruirá”, había afirmado por entonces en una entrevista con TMZ Sports. Y en sus argumentos había señalado la “mirada de perro malo” en los ojos de Tyson, un rasgo que siempre ha asociado con la peligrosidad y determinación del boxeador.
Analizando la trayectoria de ambos contendientes, se nota una diferencia notoria. Tyson cuenta con un impresionante récord de 50 victorias, 6 derrotas y 44 nocauts. Su último enfrentamiento fue una exhibición de seis asaltos contra Roy Jones Jr. en noviembre de 2020, evento que recaudó 80 millones de dólares. Mientras tanto, Paul posee un récord profesional de 10 victorias y una derrota, y ha demostrado sus habilidades al derrotar a antiguos campeones mundiales de UFC como Tyron Woodley y boxeadores legítimos como Tommy Fury.
En medio de este clima tenso, también surgieron controversias sobre el formato del choque. Paul sugirió un cambio en las reglas, proponiendo extender los asaltos de ocho rounds de dos minutos a diez asaltos de tres minutos cada uno. “¿Quieres 10 de tres? Eso es lo que pasa. Todos hablan. Yo haré lo que sea”, desafió el influencer a Mike, quien, sin embargo, rechazó la propuesta: “Debería tener mucho cuidado”.
La preparación de Tyson ha sido intensa pese a sus recientes problemas de salud. En mayo, el boxeador sufrió náuseas y mareos debido a una úlcera que lo azotó 30 minutos antes de aterrizar en Los Ángeles, lo que llevó a aplazar la pelea inicialmente programada para el 20 de julio. Aún así, ha vuelto al gimnasio y ha demostrado a través de videos de entrenamiento que todavía posee una fuerza impresionante en ráfagas cortas.
A medida que se acerca la fecha del combate, las emociones y expectativas continúan escalando. el deportista nacido en Brooklyn sostiene con firmeza su intención de dejar a su adversario sobre la lona. “Tan pronto como atrape a este tipo, se acabó. Jake Paul va a estar corriendo como una rata”, le mostró su fiereza, que amenaza con trasladar al ring como en sus mejores días.