La final de la Copa América coronó a la Argentina con el bicampeonato ante Colombia en Miami dentro de un partido que se empezó a jugar mucho tiempo antes por los incidentes registrados en las adyacencias del Hard Rock Stadium y que lo tuvieron a Alexis Mac Allister como inesperado protagonista. El volante del Liverpool perdió contacto con su familia a minutos de afrontar un encuentro decisivo y se refirió a la preocupación que generó esta situación sumado a muchos otros temas en una entrevista para Urbana Play FM.
“Sentí muchos nervios sobre todo en la previa, y por todo lo que pasó en el estadio, no tanto por el partido. Me afectó todo lo que pasó. Fue difícil. Nosotros somos jugadores de fútbol, pero no somos de madera. También nos pegan estas cosas. Lo del otro día, en lo personal, con mi familia, fue un momento de mucho nerviosismo porque escuchaba que las puertas estaban cerradas. Estaba hablando con mi novia en ese momento hasta que dejó de responderme porque se quedó sin señal. Cuando cierran las puertas, vienen al vestuario y nos empiezan a decir que algunas familias ya habían entrado y yo estaba como ‘¿y mi familia, qué onda?’. Nadie me respondía porque no había señal, era todo un quilombo, hasta que me recontra calenté porque veía que nadie me ayudaba y yo no me podía comunicar con mi familia y decidí salir a la puerta”, confesó Mac Allister.
Ese jugador que iba a jugar la definición de un trofeo continental con la Selección se encontraba en un espacio del reducto esperando conocer novedades de sus seres queridos: “Ahí estuve 15 o 20 minutos intentando llamar a mi familia hasta que me pude comunicar. Y les tuve que decir hasta qué lugar del estadio tenían que ir y que los iba a estar esperando ahí. Después, cuando ellos llegaron... Hacían 35 grados, habían estado dos horas y media abajo del sol. Llegaron y eran agua. Todos transpirados. Mi novia llorando. Otras familias llorando. Ahí te ponés a pensar y decís: ‘Qué locura estamos viendo’. ¿Cómo nosotros nos vamos a enfocar para un partido así de esta manera? Incluso, el cuerpo técnico se me acercó porque me vió un poco tocado por la situación y me preguntaron si estaba bien. No fue un momento para nada lindo”.
La trascendencia de este hecho quedó atrás recién con el pitazo inicial del árbitro brasileño, Raphael Claus: “Recién encontré paz y tranquilidad cuando arrancó el partido. Estaba pensando en mi familia en la entrada en calor. Ahí los vi en la tribuna. Me tranquilizó un poco, pero todavía pensaba en todo lo que había pasado. Una vez que sonaron los himnos y empezó el partido, me enfoqué”.
Por otro lado, reveló una desconocida charla con Lionel Scaloni en la previa al certamen organizado en los Estados Unidos, que terminó siendo vital en el aspecto futbolístico: “Tuve la posibilidad de hablar con él antes del primer amistoso, donde muchos decían que yo no jugaba (fue al banco contra Ecuador y no sumó minutos). Él me expresó todo su apoyo. Me dio una tranquilidad... Capaz que él no se dio cuenta, pero sentí una tranquilidad y unas ganas de darlo todo por ese cuerpo técnico que fue muy importante. Solo tengo palabras de agradecimiento por cómo me trato y siempre me dijo la verdad. ¿Qué me dijo? Prefiero guardarmelo para mí, pero me sirvió mucho. Para mí, fue clave. Me dio una tranquilidad que yo necesitaba para poder estar bien y rendir en la cancha”.
En distinta sintonía, el mediocampista de 25 años fue consultado sobre su rutina cotidiana antes de afrontar cada encuentro, aclaró que no va al psicólogo, pero contó una de sus actividades casi obligatorias antes de saltar a la cancha: “Tengo mi ritual. Tengo un diario en el que intento escribir todos los días. A veces, se me pasa. Siempre el día anterior es la noche más importante. Ahí es donde agarro un poco de paz, me pongo a escribir y siento que me ayuda un montón por ese lado. Eso es uno de los rituales más importantes que tengo. Muchas veces no demuestro cosas por fuera, pero por dentro estoy sintiendo. Los nervios están, hay que normalizarlo. Es representar a la selección argentina y jugar ante 80 mil personas. Sentir esos nervios es parte de eso. Tenía un DT en Argentinos que decía que, a veces, es hasta necesario para estar alerta. Lo vivo desde ese lado, de disfrutar lo que hago porque me gusta lo que hago”.
Más adelante, Alexis Mac Allister expresó qué suele escribir en ese cuaderno íntimo: “Siempre arranco hablando sobre lo que voy sintiendo en el momento. Si estoy bien, mal o si tuve un problema. Arranco por algo que quiera descargar. Después, paso a un ámbito más futbolero. Empiezo a manifestar lo que me gustaría que pase, o a imaginarme cosas del partido, cómo resolver”. “Creo mucho en el poder de la energía y las palabras. Cuando uno lo quiere, termina sucediendo. Arranqué a hacerlo antes del Mundial. Desde ahí, me sirvió, me hizo muy bien y lo adopté. Agradezco por todo, valoro mucho lo que tengo. Y pido para que mi familia pueda disfrutar de todo lo que vivo”, siguió.
MÁS FRASES DE ALEXIS MAC ALLISTER:
Su sensación al verlo llorar a Messi durante la final: “Hoy veía un reportaje a Rodri De Paul en el que hablaba que, cuando Leo se lesiona y se pone a llorar, eso sale en la pantalla del estadio. Había cuatro pantallas gigantes, era imposible no verlo. Se armó un griterio, mirabas para arriba y lo veías llorando... Esas cosas te pegan”.
¿Habló con algún compañero sobre esas imágenes de Messi? “En la cancha no lo hablé con nadie. Al final, pasan un millón de cosas en tan poco tiempo que quizás no te da el tiempo o no estás enfocado en eso, pero creo que todos los vimos en ese momento y todos pensamos lo mismo. Sabemos que, cuando Leo está fuera de la cancha, el partido va a ser mucho más complicado. Ahí tenés que dar muchísimo más de lo que podes dar. Lo importante es que Fideo se pudo ir de la Selección con otra Copa y que Leo pudo cosechar otra Copa más allá de la lesión”.
Su curioso diálogo con Jhon Arias en medio del partido de Argentina-Colombia: “En el primer córner del partido, se me puso cara a cara y estaba muy serio y le dije: ‘Che, qué serio. Disfruta un poco, loco’. Después, cuando nos empujamos, yo tenía una amarilla y él buscaba una reacción. Se me pegaba mucho a la cara. No me acuerdo lo que dijo, pero me causa gracia cuando se quieren hacer los malos. Ahí me dijo el árbitro que yo tenía amarilla y que no haga nada raro”.
La broma a Luis Díaz, compañero en Liverpool, durante la final de la Copa América: “Él estaba jugando por izquierda en el primer tiempo y en el segundo tiempo se vino a la derecha. Y le dije: ‘¿Qué hacés acá? Andá para el otro lado que sino te tengo que marcar yo y no te puedo agarrar’, ja”.
El gesto de Jürgen Klopp, ex DT en Liverpool, después de levantar este trofeo con la Selección: “Es un personaje hermoso. Se disfrutaba el día a día, era cercano al jugador y pegué onda desde el principio. Me tuve que bancar las cargadas de mis compañeros diciendo que era mi papá, ja. Soy un agradecido porque me dio la posibilidad de jugar en uno de los clubes más grandes del mundo, por todo lo que me ayudó. El otro día me escribió para felicitarme por la Copa América. Él está atento a todos los detalles”.
Las disculpas de Enzo Fernández por el video que se viralizó en los festejos de la consagración: “Es un tema muy sensible, hay que tener cuidado con lo que se dice y hace. Europa es mucho más sensible porque Argentina no es un país racista y no estamos acostumbrados a hablar tanto de eso. Sí es un tópico importante. Hay que valorar que él ya pidió las disculpas y explicó lo que pasó. No hay mucho más para decir. Lo conocemos, sabemos que nunca lo haría con mala intención, sino que es un cántico más en tono de burla que otra cosa, pero hay que tener mucho cuidado”.
Su conversación con Darwin Núñez tras protagonizar una pelea con hinchas colombianos en la semifinal con Uruguay: “Hablé con él después de ese partido. No para cuestiones de fútbol, sino para hablar sobre esa situación, cómo estaba él. Estaba dolido y enojado por todo lo que pasó. Pero estaba bien”.
La sincera pregunta de una persona de su entorno: “Ayer, yo estaba con mi novia. Llegó una amiga de ella y me dice: ‘Che, ¿a ustedes se les pasa por la cabeza que en algún momento pueden perder en la final?’ Y le dije que sí, es un partido de fútbol, todo puede pasar. Es un mensaje que intentamos dar. Durante la Copa América, escuchábamos las preguntas que nos hacían y sentíamos que no se valoraba lo que estábamos dando. No es fácil todo lo que estamos haciendo. Hay que ser agradecidos. Nosotros sabemos que no siempre es así, vivimos un momento único. No va a ser así toda la vida porque se pierde más de lo que se gana”.
La despedida de Ángel Di María: “Fue muy emotivo. No solo el día del partido, sino la noche anterior, cuando Leo le hace el regalo de una camiseta firmada por todo el plantel. Se escapó alguna lágrima. Lo tomamos para el lado bueno. Somos conscientes de lo que nos dio Fideo durante todo este tiempo. Para nosotros, siempre fue un ejemplo. Más allá de ser criticado, siempre quiso estar acá. Nos gustaría que él y Leo sigan para siempre, pero también hay decisiones personales”.
España, próximo rival en la Finalissima: “Miramos mucho la Euro. España fue justo ganador por todo lo que demostró durante el torneo. Pensamos mucho en la Finalissima. Iba a ser España o Inglaterra. Al final, tocó España. Tenemos muchos partidos por delante, pero la Finalissima será un partido muy importante”.