Después de consagrarse en Wimbledon al vencer a Novak Djokovic y conquistar un nuevo Grand Slam, el tenista español Carlos Alcaraz se convirtió en el impensado protagonista de una novela romántica que crearon los usuarios en las redes sociales tras ser testigos de una curiosa respuesta que dio en la conferencia de prensa posterior a su triunfo.
En medio de las preguntas acerca del duelo que acababa de disputar, un reportero lo sorprendió al consultarle sobre la presencia de la joven tenista Emma Raducanu en las gradas de la cancha central.
“No lo sé, no lo sé. Creo que mucha gente vino a ver la final”, dijo el cuatro veces campeón de Grand Slam visiblemente sonrojado. “No sé si vino a la final o si vino a verme a mí. Quién sabe, habría que preguntárselo a ella”, añadió, arrojándole el guante a la campeona de US Open en 2021.
Posteriormente, explicó: “Creo que Novak y yo siempre hacemos un buen partido, un espectáculo en la cancha. Creo que es un partido hermoso de ver. Y ella es de aquí, así que imagino que quería venir a verlo. Si hubiera un Grand Slam en Murcia iría al cien por cien a la final, aunque no jugara”.
Esa respuesta, sumada a las que venían produciéndose semanas atrás, les produjo cierta intriga a los fanáticos que no tardaron en pronunciarse en las redes sociales. “¿Cuándo se harán públicos tu y Carlitos?”, escribió un seguidor en las redes sociales de Radacanu. Otro agregó: “Carlitos ya dejó un me gusta”. “Emma, por favor, deja que Carlos se concentre”, escribió otro usuario bromeando sobre una posible relación amorosa. “¿Recuerdas cuando Alcaraz vio a Raducanu entre el público y se convirtió en el mejor Federer?”, bromeó un cuarto.
Esta no es la primera vez que uno habla del otro públicamente. A principios de julio, la tenista fue protagonista de un episodio que dio de qué hablar en el mundo del tenis tras anunciar que no iba a disputar el dobles mixtos de Wimbledon, una decisión que privó a Andy Murray de despedirse del deporte jugando un último partido ya que ambos iban a ser pareja. “Obviamente que Andy estaba decepcionado, pero yo tuve que priorizar mi cuerpo”, explicó Raducanu a los medios.
Fue entonces que Carlos Alcaraz salió en defensa de la británica: “Estoy seguro que no era algo que quería hacer. Ella tenía sus razones, problemas físicos. Tenía por delante una cuarta ronda de Grand Slams en singles y estoy seguro que muchos jugadores en su posición habrían hecho lo mismo”.
Semanas atrás, Raducanu también tuvo palabras hacia el español. Luego de su victoria ante la griega Maria Sakkari (9ª) en el torneo inglés, reconoció que siguió el partido entre Alcaraz y Tiafoe, quienes se midieron en la tercera ronda. “He seguido los dos últimos partidos de Carlos y es algo muy bueno para ver antes de salir a jugar. En ciertos momentos, trato de emular sus tiros. Es un tenis increíble, muy divertido de ver”, reconocía.
Los medios británicos The Mirror y Metro plantearon interrogantes ante el nacimiento de estos rumores en torno a las dos estrellas del tenis. Los diarios de ese país aseguran que Raducanu habría estado en pareja tiempo atrás con Carlo Agostinelli, hijo del multimillonario Robert Agostinelli, pero que esa relación se habría terminado meses atrás. Incluso recordaron una respuesta de la jugadora al diario The Times en mayo pasado: “Mis padres estaban muy en contra de eso [los novios] porque interferían con el entrenamiento. Cuando era más joven ni siquiera me permitían salir con mis amigas”, relató. También recogieron frases del propio Alcaraz sobre su situación sentimental en ese mismo periódico antes de Wimbledon: “Estoy soltero. Estoy buscando a alguien. Puede ser difícil para un jugador de tenis conocer a la persona adecuada porque estás viajando todo el tiempo”.
Lo cierto es que ambos jóvenes tenistas están llamados a ser los referentes del tenis actual. Mientras que Carlos Alcaraz, con 21 años logró un nuevo título y se ubica tercero en el ranking de la ATP por detrás de Novak Djokovic y Jannik Sinner, Raducanu (también de 21) volvió a meterse en el TOP 100 después de regresar de una operación en el tobillo y una serie de lesiones que la alejaron de su mejor tenis. “Sé que voy a necesitar un tiempo para alcanzar mi máximo nivel, pero también tengo claro que soy demasiado buena como para no conseguirlo si trabajo de forma constante”, reconoció tras caer en octavos de final de Wimbledon.