Inglaterra está a pocas horas de afrontar el partido más importante de la selección en mucho tiempo porque este domingo se medirá a España desde las 16 (hora argentina) con la posibilidad de romper una sequía de 58 años sin títulos en la Mayor, luego de aquel Mundial 1966. Sin embargo, la concentración de los Three Lions en la Eurocopa se vio afectada en los últimos días por un escándalo extramatrimonial de larga data que podría poner en jaque a una de las figuras del equipo.
Kyle Walker ha tenido una temporada convulsionada en el plano familiar porque se descubrió que tuvo un segundo hijo con Lauryn Goodman en medio de su matrimonio con Annie Kilner (el primero fue durante un impasse con su esposa). Y ahora, ambas mujeres podrían coincidir en el Estadio Olímpico de Berlín, después de que Goodman haya realizado un posteo durante la victoria por penales ante Suiza en los cuartos de final con tres fotos de sus dos hijos vestidos con la camiseta de su papá y una frase que uno de ellos le habría dicho: “¿Podemos ir de nuevo?”.
Una nota exclusiva de la periodista Amelia Wynne, en el diario británico Daily Mail, reveló que esa publicación llegó a los ojos de Kilner, quien mostró que su estado de ánimo no era el mejor en el Düsseldorf Arena y una fuente cercana a la delegación estalló contra Goodman: “Los entendidos en el campamento de Inglaterra dicen que están hartos de la distracción fuera del campo fabricada por Lauryn”.
A pocas horas del duelo decisivo, una persona le confió al Mail Online que no hay ningún operativo diseñado para evitar que las dos mujeres coincidan en un mismo espacio del estadio: “La FA nunca reforzó la seguridad cuando Lauryn visitó Alemania para ver la Eurocopa y dijeron que era bienvenida a ver el partido con los hijos de Kyle. No quieren involucrarse en asuntos familiares”.
Sin embargo, el portal español Marca se hizo eco de una información ofrecida por el periódico The Sun, donde informaban que “los servicios de seguridad que protegen a la selección inglesa recibieron la orden de que Lauryn Goodman no pudiera acercarse a la zona de las parejas de los futbolistas de Inglaterra para evitar posibles incidentes”. Hasta el encuentro ante Suiza, ella había asistido únicamente al segundo partido de Inglaterra en la zona de grupos -el 20 de junio en Frankfurt ante Dinamarca-, manteniéndose alejada de Annie Kilner. El Mail Online afirmó que las otras esposas y novias de los futbolistas le han prometido su respaldo a ésta última en medio de este “circo” mediático.
El matutino apuntó que la madre de Roman, de once años, Riaan, de siete, Reign, de cinco, y Rezon, de pocos meses de vida, todos fruto de su relación con Kyle Walker, lo acompañó a lo largo de la Eurocopa, aunque ha prometido “no hacer el papel de familia feliz” en Alemania, anfitrión del campeonato más importante a nivel selecciones del Viejo Continente.
Walker, que registra 89 partidos con Inglaterra, ha intentado manejar la situación discretamente por el bienestar de todos sus hijos. “Kyle está desesperado por proteger a Annie y a sus hijos; pase lo que pase entre ellos como pareja en el futuro, ambos están de acuerdo en que esto es una prioridad. Y gran parte de eso consiste en protegerlos de la especulación mediática y el circo alrededor de la situación,” explicó una fuente cercana al jugador.
Tiempo atrás, se confesó en una entrevista con The Sun tras cometer la infidelidad: “Lo que he hecho es horrible y asumo toda la responsabilidad. Tomé decisiones idiotas. No puedo empezar a pensar o imaginar lo que está pasando Annie. Intenté preguntarle pero hay dolor y dolor”.
En medio de este contexto, el lateral derecho del Manchester City fue padre de un cuarto niño (Rezon) con Kilner en abril de este año. “Annie dio a luz a principios de esta semana y está bien. La mamá y el bebé están felices y sanos. Kyle no podría estar más feliz y está muy orgulloso”, informó la familia del jugador. A sus cuatro hijos con su esposa, se suman los concebidos con Goodman: Kairo, de cuatro años, y una niña de diez meses.
Con la atención mediática constante, Walker estaría considerando un cambio de equipo porque su entorno ha precisado que le consultó a su amigo Riyad Mahrez por la vida en Arabia Saudita. Vale aclarar, el argelino coincidió con él en el City, y ahora se encuentra en el Al-Ahli de la Pro League saudí. El inglés de 34 años piensa que mudarse serviría para afianzar su lazo con Annie Kilner tras las traiciones.
Sin embargo, su portavoz intentó calmar los ánimos en cuanto a los trascendidos de una marcha anticipada del vigente campeón de la Premier League, con quien posee contrato hasta junio de 2026: “Kyle está orgulloso de ser parte del equipo de Inglaterra y emocionado con el increíble resultado de esta noche. Él continúa enfocado en los partidos y en el objetivo de llevar el trofeo a casa para los millones de fanáticos que están viendo”.