La selección de Bélgica consiguió este miércoles su pasaje a los octavos de final de la Eurocopa, aunque cerró la primera fase con el sabor amargo de haber finalizado en el segundo puesto del Grupo E, que en la previa lo presentaba con el gran favorito.
Tras una inesperada derrota en el debut ante Eslovaquia y un triunfo frente a Rumania que pareció enderezar el rumbo, los Diablos Rojos empataron 0-0 con Ucrania en Stuttgart, en un duelo en el que estuvieron al borde de la eliminación, dado que un gol de los ucranianos los hubiera dejado últimos en su zona y fuera de la competencia.
En cotejo intenso y parejo, los dirigidos por Domenico Tedesco no cumplieron con las expectativas y sufrieron sobre el final, cuando su rival estuvo cerca de anotar el tanto de la clasificación con un córner ejecutado por Ruslan Malinovskiy que el arquero Koen Casteels terminó salvando sobre la línea.
Luego del susto, una vez concluido el encuentro el plantel encabezado por Kevin De Bruyne empezó a caminar hacia uno de los arcos para saludar a su parcialidad. Sin embargo, no llegaron a hacerlo porque los hinchas comenzaron a reprobar la actuación de los futbolistas, manifestando su decepción y enojo con una lluvia de silbidos y abucheos.
Ante esa expresión de rechazo, el mediocampista del Manchester City decidió dar marcha atrás y abandonar del campo de juego dándole la espalda al público. Mientras algunos de sus compañeros -como Johan Bakayoko y Loïs Openda-habían alzado tímidamente los brazos para saludar, el capitán les hizo gestos y los dirigió rumbo a los vestuarios. Así, se retiraron bajo una silbatina que se hizo todavía más ensordecedora.
La actitud del plantel refleja la tensión existente en la relación entre el equipo y los hinchas belgas. Más allá de eso, Tedesco dijo que los silbidos le llamaron la atención: “Estoy sorprendido. Lo único que importaba era la clasificación. Perdimos el primer partido, por lo que las condiciones no fueron fáciles. Después de nuestra victoria contra Rumania todos estaban contentos. Mis jugadores no entienden que ahora nos silben. Ucrania fue un rival difícil e hicimos todo lo que pudimos para marcar. Pero bueno, hay que aceptarlo”.
“Este grupo era más difícil de lo que muchos pensaban. Sobre el papel, puedes ser favorito, pero hay que jugar los partidos y estos equipos no tienen absolutamente nada que perder. Juegan desde atrás, pueden perder el balón. Además, tienen jugadores de calidad, nosotros no jugamos ante equipos pequeños”, añadió el entrenador en la rueda de prensa.
Con figuras como Romelu Lukaku, Leandro Trossard y Jeremy Doku, además de De Bruyne, Bélgica se halla bien posicionado en el ranking FIFA desde hace varios años y en el inicio de cada competencia asoma como uno de los potenciales candidatos al título. Pero le cuesta concretar. En la última década, su mejor participación se dio en el Mundial 2018, donde llegó a semifinales. En el resto de los torneos grandes no pudo superar la barrera de los cuartos de final. Y en la Copa del Mundo de Qatar 2022 fracasó al quedar eliminada en fase de grupos.
Ahora, en medio de las dudas por el rendimiento y de los cuestionamientos de sus aficionados, para seguir soñando en esta Euro 2024 deberá vencer a Francia, que salió segundo en su zona. El choque será el lunes que viene en Düsseldorf.
“Vamos a ganar. Estos son los partidos que buscamos y todo es posible”, dijo con confianza el DT.