El que es considerado para muchos el “Grupo de la Muerte” de esta Eurocopa volvió a dar una función de lujo. El 2-2 protagonizado entre Croacia y Albania no fue apto para cardíacos. Las Águilas volvieron a dar la nota con un gol tempranero que generó sorpresa en propios y ajenos, mientras que los balcánicos se repusieron en una ráfaga a falta de poco del final y no pudieron sostener la victoria. Ahora el marcador dejó interrogantes instalados en la definición de la zona, que será este lunes.
Albania, que venía de registrar el gol más rápido de la historia en la Eurocopa contra Italia (Nedim Bajrami a los 23 segundos), golpeó no tan anticipadamente pero sí lo suficiente para quemarle los papeles al entrenador croata Zlatko Dalic. El autor de la conquista fue Qazim Laci quien, de cabeza, hizo delirar a la marea roja y negra que volvió a colmar una tribuna en este certamen continental que hoy tuvo cita en Hamburgo.
Las estadísticas del match marcarán que en apenas poco más de 120 segundos los croatas torcieron la historia. Desde hacía varios minutos empujaban en busca de un empate que a esa altura ya sonaba a justo y lo consiguieron a través de su delantero Andrej Kramaric, con una definición al primer palo con la que dejó parado al arquero Thomas Strakosha, que hasta allí había devuelto todolo que le habían tirado. Enseguida, una escalada por izquierda de Ante Budimir terminó con centro atrás y blooper de los albaneses: Klaus Gjasula tuvo la desgracia de meterse en el camino del rechazo que pegó en su humanidad y decretó el 2-1 parcial para los croatas.
Los balcánicos tuvieron todo a su merced para estirar la ventaja, liquidarlo e incluso empezar a sumar diferencia de gol teniendo en cuenta alguna posible igualdad en puntos. Sin embargo, se toparon con Strakosha y paulatinamente se fueron conformando con la victoria por la mínima que se les escurriría de las manos. Los avisos de Arber Hoxha y Mirlind Daku no solamente inquietaron a Livakovic cuando se consumían los últimos minutos, sino que fueron el preludio de lo que acontecería al minuto 95.
Con sed de revancha, Gjasula pisó el área rival a la espera de un centro a la cabeza que finalmente fue buscapié con desvío en un defensor croata. La bola cayó en su posición y el número 8, que cargaba con al frustración del gol en contra, no dudó en darle de primera para someter al 1 croata. La celebración de las Águilas casi se potencia con un par de contragolpes mal concluidos que pudieron haber significado el triunfo agónico, aunque también hay que marcar que Croacia tuvo su chance con un remate a quemarropa de Kovacic antes del pitazo final.
Ahora la historia y el destino de ambos se definirá el próximo lunes, cuando a partir de las 16 (hora argentina), afronten su última presentación por la fase de grupos de la Eurocopa 2024. Croacia se las verá con Italia, mientras que Albania se medirá con España. Vale recordar que los cuatro mejores terceros de un total de seis grupos también accederán al cuadro de octavos de final. Aunque, según los números, es difícil pasar de ronda sin ganar ninguno de los tres cotejos.