“¿Quién es realmente Kylian Mbappé?”, se preguntó L’Equipe sobre el futbolista que se prepara para disputar la Eurocopa con su país y que recientemente ocupó el centro de la atención del mundo del fútbol por su traspaso al Real Madrid.
Para responder el interrogante, el diario francés hizo una investigación que abarcó la historia de vida del delantero y las opiniones de quienes trabajaron con él en lo que va de su joven carrera. El objetivo fue conocer los rasgos de su personalidad, teniendo en cuenta que “los futbolistas pueden hablar de él durante horas y el público, en general, tiene un montón de ideas preconcebidas al respecto”.
Y la conclusión fue la siguiente: definieron a la estrella del seleccionado galo como una persona impaciente, talentosa, arrogante, decisiva, egocéntrica, determinada, inconstante, inteligente, caprichosa, ambivalente, rápida y provocativa.
El artículo publicado este jueves recopiló anécdotas, revelaciones y comentarios que llevaron al autor a elegir esos atributos. Allí se destaca que Mbappé desde pequeño tenía sueños de grandeza y de llegar a ser el mejor futbolista del mundo. También una ambición por vestir los colores del Real Madrid, algo conocido hace tiempo luego de la famosa imagen de su habitación llena de posters de Cristiano Ronaldo y de su foto con el astro portugués. Incluso, en su adolescencia el francés tenía un perfil de Facebook con el nombre “Kylian Robinho Gaucho” y varios comentarios en apoyo al Merengue.
Kylian Mbappé es el segundo de tres hermanos. Nació el 20 de diciembre de 1998 y se crió en un barrio de las afueras de París. Proviene de una familia muy vinculada a los deportes: su madre, Fayza, de origen argelino, fue jugadora de básquet, abogada, empresaria y asesora de futbolistas. De hecho, ella gestiona la carrera de su hijo. En tanto, su padre, Wilfried, originario de Camerún, fue jugador y actualmente es entrenador y consultor de fútbol.
Según L’Equipe, de niño, Kylian les decía sus compañeros de colegio, a su familia y a sus profesores que se convertiría en el mejor jugador del planeta. Y en su etapa en el AS Mónaco imaginaba ganar el Balón de Oro. Frédéric Barilaro, director del centro de formación de ese club, contó que se sorprendió cuando lo conoció: “Sentí una determinación, una confianza, algo que nunca había visto en un chico de 14 años. Hizo preguntas, se expresó. Dijo que quería hacer esto o aquello”.
Barilaro también recordó que después del primer entrenamiento del delantero con el plantel profesional -en una época en la que coincidió con Dimitar Berbatov o Radamel Falcao García, entre otras figuras- la directiva del Mónaco le preguntó por el nivel que había demostrado y qué les había llamado la atención. “No era normal. Nos sorprendía todo el tiempo”, dijo el director.
Los testimonios recopilados por el periódico francés resaltan la mentalidad de Mbappé. Christophe Galtier, quien lo dirigió en París Saint Germain, lo definió como un jugador “fuera de norma”. Thierry Oleksiak, asistente técnico con el que coincidió en ese mismo club, agregó: “Ser excepcional, para Kylian, es normal”. “Cuando ha decidido tener algo, hará todo lo posible para obtenerlo. Con algo en mente, se convierte en un asesino a sueldo, aunque eso signifique parecer extraño”, dijo por su parte un director técnico que prefirió el anonimato.
“A medio camino entre Spider-Man y Harry Potter”, lo describió el escritor francés Julien Blanc-Gras. Con caprichos de niño, como cuando en sus inicios lo regañaban por su poca predisposición a presionar en la salida o seguir a un defensor. “Puede pasar por megalómano o egoísta”, apuntó un empleado del PSG que supo tratarlo. “Ha comprendido perfectamente el hecho de ser extraordinario”, planteó en la recopilación un entrenador del París que, según consignó L’Equipe, optó por el anonimato. Esta misma fuente le adjudicó una frase contundente al delantero, tras una jornada en la que brilló en un partido de Liga de Campeones: “Quería demostrar que no podían prescindir de mí”.
En el artículo además se destaca que el futbolista ha dado pocas entrevistas introspectivas desde que se volvió mediático y que tiene “un gran conocimiento” de su deporte y de otros, incluso “conoce la biografía de glorias pasadas” y es seguidor de otros deportistas de su país, como el nadador Léon Marchand.
Por último, se menciona que vio y le gustó mucho el documental The Last Dance, que narra el ascenso de Michael Jordan y la trayectoria de los Chicago Bulls en los noventa. “El documental es ideal para entender cómo funciona el cerebro de un campeón legendario y una forma de calibrar, para un niño que siempre ha soñado con este estatus, qué le queda por hacer para alcanzarlo”, concluyó la evaluación que hicieron sobre Mbappé.