Gary Medel, uno de los primeros sueños que tuvo Juan Román Riquelme como directivo de Boca Juniors, arribó a Argentina anoche y esta mañana a primera hora se acercó a una clínica porteña en la que le realizan estudios antes de la firma de su contrato. El chileno se desvinculó de Vasco da Gama y quedará vinculado al Xeneize hasta diciembre de 2025 para sumarse al plantel dirigido por Diego Martínez. El Pitbull quedará a disposición para entrenarse este jueves con el grupo y si bien no estaría disponible para el duelo de mañana contra Vélez, sí podría debutar contra Almirante Brown el miércoles que viene en Copa Argentina.
“Extrañaba al hincha de Boca”, fue lo que declaró tras salir de la revisión médica al ser interceptado por al menos una decena de fanáticos que le pidieron fotos. “Un saludo muy grande a la gente de Boca. Muy contento de estar aquí nuevamente. Espero dar lo mejor”, había sido el mensaje que compartió el chileno y que subió la cuenta oficial de Boca Juniors.
El arribo al país del futbolista de 36 años tuvo un momento insólito cuando una mujer lo siguió casi desde el avión para entregarle su billetera que había extraviado sin darse cuenta. “Perdoname tengo su billetera. Señor, tengo su billetera que se olvidó en el avión”, le gritaron a Gary, quien se dio vuelta muy sorprendido y le agradeció el gesto. En el apuro de Medel por salir rápidamente del aeropuerto no reparó en que le faltaba algo tan importante.
El operativo seducción de Román se inició en 2020 y se prolongó durante años. Lo tentó, lo cautivó y finalmente lo ablandó. Puede ser que este Medel, que viene de ser suplente en Vasco y quedó fuera de la lista de Ricardo Gareca con la selección chilena previo a la Copa América, no sea la mejor versión de aquel polifuncional marcador que ganó dos títulos continentales con su país y supo hacer carrera en Europa, pero sin lugar a dudas el Xeneize suma jerarquía y el cuerpo técnico contará con un futbolista que puede llegar a cubrirle varios huecos en el once.
“Hablo bastante con Riquelme yo. Hablo una vez a la semana y de todo, del fútbol, de la familia. Y Boca siempre es algo importante en Sudamérica, en el mundo, y obviamente volvería encantado”, fueron las declaraciones que el jugador de 36 años había expresado en el inicio de la gestión de Riquelme como dirigente xeneize. Ya desde ese entonces Román, que lo había tenido como compañero en los años 2009 y 2010, le propuso volver a ponerse la camiseta azul y oro. “Boca te mueve”, fue el guiño del Pitbull, que incluso agradeció públicamente las dos camisetas que el ídolo boquense le envió en ese entonces.
Tal fue el grado de confianza que se gesto entre Riquelme y Medel que el trasandino se animó a recomendarle a dos compañeros suyos de selección, uno de los cuales estuvo muy cerca de ser contratado por Boca hace un tiempo: Mauricio Isla, que milita en Independiente (el otro era Charles Aránguiz, que está en Inter de Porto Alegre).
En 2020 Gary terminó su contrato con el Besiktas de Turquía y arregló su arribo al Bologna de Italia, donde permaneció cuatro temporadas teniendo gran protagonismo (superó el centenar de partidos jugados). Esa fue una de las limitaciones que le impidieron regresar antes a la Bombonera, que guardó para la eternidad su doblete en el Superclásico contra River por el Clausura 2010, antes de emigrar al Sevilla de España.
Imposibilitado de sumarlo por la cantidad de extracomunitarios, Riquelme hizo pública su frustración el año pasado: “Estábamos esperando la libertad de un cupo con Gary Medel, con quien tengo buena relación de toda la vida y le dije que se vaya a jugar a otro lado porque no teníamos cupo. Él se muere por jugar acá, pero no teníamos la posibilidad. Sabe que yo lo quiero mucho”. El anhelo se postergó, pero ahora se hará realidad.
Como Equi Fernández podría ser vendido a Europa y Campuzano se marchará a Atlético Nacional de Medellín, el arribo de Medel le dará una alternativa para el mediocampo a Diego Martínez, quien ya le levantó el pulgar. Además, la versatilidad del chileno lo convierte en un comodín para la defensa ya que puede moverse tanto como zaguero central (como jugó en el último tiempo) y hasta stopper o lateral derecho. Según pudo averiguar Infobae, el DT lo piensa como volante central en tanto y en cuanto no se ausenten por algún motivo Cristian Lema, Aaron Anselmino y Marcos Rojo.
El Consejo de Fútbol de Boca se moverá ahora por la contratación de al menos dos mediocampistas más. Si bien todavía no llegaron ofertas formales por Equi Fernández y Cristian Medina, los sondeos desde el exterior son firmes y tanto Riquelme como el resto de los miembros del CdF saben que podrían emigrar en este mercado de pases. Los apuntados son Fausto Vera (Corinthians) y Tomás Belmonte (Toluca de México). Y, en caso de que Aaron Anselmino sea transferido, también irán por un marcador central.