El cuadro femenino de Roland Garros tuvo un histórico batacazo con la victoria en cuartos de final de la rusa Mirra Andreeva, de 17 años, ante la experimentada y número 2 del mundo, la bielorrusa Aryna Sabalenka por 6-7 (5), 6-4 y 6-4.
Andreeva, que se ubica en el puesto 38 del ranking WTA, avanzó a la semifinales del Grand Slam de París y se enfrentará el jueves a la italiana Jasmine Paolini (15°), que en el turno previo en la pista central había derrotado a la kazaja Elena Rybakina (4°) por 6-2, 4-6 y 6-4.
Esta victoria de Andreeva ante Sabalenka, de 26 años, marca un nuevo hito en la historia del tenis, ya que desde el US Open de 1997 que no se repetía una semifinalista tan joven en un torneo de semejante envergadura. La anterior había sido la suiza Martina Hingis.
La rusa, quien tiene 17 años y 29 días, ya venía marcando algunos récord precoces en el tenis y se la recuerda por haber alcanzado los octavos de final en Wimbledon (2023) y en el Abierto de Australia (2024), pero este Roland Garros marcó su mejor actuación en un torneo grande.
“Sinceramente, estaba realmente nerviosa antes del partido. Sabía que ella tenía ventaja”, expresó Andreeva, haciendo hincapié en que en su historial previo con Sabalenka nunca había podido ganarle siquiera un set.
Uno de los momentos decisivos del partido ocurrió en el tercer set, cuando Sabalenka tomó ventaja con un quiebre para ponerse 3-2. Sin embargo, Andreeva no se atemorizó y continuó siendo agresiva en el juego para recuperar el break y continuar con solidez hasta completar su épica victoria en la pista central del complejo francés.
“Hoy, mi entrenadora y yo teníamos un plan de juego, pero no me acordaba de él. Simplemente jugué como sentía que tenía que jugar”, sorprendió la joven tenista al revelar el dato ante el público que no cesaba de vitorearla. Su orientadora, es nada menos que la española Conchita Martínez (52 años), quien fue campeona en su etapa de jugadora en Wimbledon (1994) y subcampeona en Roland Garros (2000).
Esta eliminación significa un trago amargo para Sabalenka, quien fue campeona al inicio de esta temporada del Abierto de Australia. La bielorrusa llegó a Roland Garros como la gran candidata a destronar a la favorita polaca Iga Swiatek, que el jueves se medirá en semifinales a la estadounidense Coco Gauff, número 3 del ranking femenino.
Semifinalista el año pasado en la tierra batida de París, Sabalenka jugó el duelo ante Andreeva decaída físicamente al encontrarse enferma. La jugadora requirió atención médica durante el partido y se le vio constantemente haciendo gestos, con cara de preocupación, mientras en la pista se multiplicaban errores que no son frecuentes en su juego.
Andreeva escribió su nombre en la historia del tenis, pero no se conforma y va por más en París. El jueves, los ojos estarán posados en la joven de 17 años, que intentará llegar a la final en el duelo frente a la italiana Jasmine Paolini, 11 años mayor.