Ayrton Senna fue uno de los mejores pilotos de la historia y pudo explotar su talento gracias a tener un auto competitivo. El recordado brasileño, que hace 30 años perdió su vida en el fatal accidente en Imola, supo capitalizar los resultados desde su arranque en el karting hasta los monoplazas en la Fórmula 1, donde se consagró campeón mundial en 1988, 1990 y 1991.
En el homenaje que se le hizo en el Autódromo José Carlos Pace de Interlagos en su San Pablo natal, se anunció la presencia de una exhibición de objetos personales que su familia guardó celosamente hasta este miércoles 1 de mayo y los expuso en una galería montada en los boxes del circuito paulista. Infobae pudo verlas todos al detalle.
Algunas de estas joyas están en el edificio donde se ubica la fundación que lleva el nombre del recordado tricampeón mundial y se ocupa de ayudar en la formación escolar a los chicos. Se trata de un viejo anhelo que siempre tuvo Ayrton con el objetivo de asistir a los que más lo necesitan en su país.
La fundación está a cargo de la hermana de Ayrton, Viviane, quien suele tener un bajo perfil al igual que su familia. Aunque cueste creerlo, Senna no tiene un museo oficial en Brasil debido a que su familia prefiere guardar los recuerdos del ídolo y en contadas ocasiones muestran algo de forma pública.
Aunque en esta oportunidad llevó más 50 objetos del recordado astro y todos se guardan en impecable estado. Entre ellos pudieron verse buzos antiflama de su época de McLaren y Lotus (uno negro y otro amarillo), una máscara para la misma protección y unos diez cascos, desde el primero que usó en karting hasta uno de los últimos que utilizó en Williams.
También trofeos como el de su primera victoria en F1 que fue en Estoril, Portugal, en 1985, bajo un aguacero. Los de Brasil 1991 y 1993, que fueron muy especiales por vencer ante su gente. El de Mónaco 1992, cuando debió aguantar hasta el final a un intratable Nigel Mansell con su Williams. Y el de Suzuka 1993, su penúltima victoria en la F1. También hubo un espacio destinado a sus tres campeonatos mundiales. En esa época no se entregaba una copa y el galardón consistió en un trofeo redondo con detalles al estilo de una plaqueta.
Su etapa en categorías promocionales tuvosu espacio y aparecieron sus cascos de la Fórmula Ford, la Fórmula 3 Británica y el cetro que le entregaron por consagrarse en éste última, que es una plaqueta con el principal auspiciante de entonces de la categoría que era una reconocida marca tabacalera.
Yendo más atrás en su historia, estuvo el trofeo por el Campeonato Brasileño de Karting de 1977 y el obtenido en el Campeonato Panamericano de Karting en 1982. Aunque las grandes joyas de sus inicios fueron el primer karting al que se subió a los 4 años y el casco que usó en su primera competencia, que incluyó el tradicional color amarillo.
Otra perlita fue la lancha de Ayrton llamada “Pole Positions”, un nombre ligado al brasileño, quien en su momento fue el rey de las clasificaciones con sus 65 mejores registros históricos, marca que recién batió Michael Schumacher en 2006. Sobre esa lancha que él mismo manejaba, disfrutó los veranos en la casa familiar de Angra dos Reis. En el evento estuvo presente su sobrina, Lalalli Senna, quien le contó a Infobae que su tío se divertía como un chico más y era muy feliz cada vez que retornaba a su país, donde recargaba las pilas para la siguiente temporada.
Cada uno de los tesoros exhibidos sirven como testimonio de la campaña del astro brasileño y es un recorrido histórico de cada una de sus etapas. Desde sus comienzos en el karting hasta la cima del automovilismo.
Ante la cantidad y calidad de gemas que ofreció la muestra, los visitantes quedaron asombrados y hubo largas colas para poder sacarse fotos con alguno de los buzos y el elegido fue el icónico rojo de su etapa McLaren.
Este miércoles se cumplieron 30 años de la muerte de Ayrton Senna, quien en una década en la F1, además de sus tres coronas, sumó 41 victorias en 161 Grandes Premios, 65 poles positions, 80 podio y 19 récords de vueltas. Para recordarlo se llevó a cabo la 19º edición de su homenaje en Interlagos, donde supo ganar dos veces en la Máxima y los brasileños lo siguen venerando.
LOS TESOROS DE SENNA: