El triunfo de Boca 2-1 ante San Lorenzo por la Copa de la Liga trajo aparejado una mala noticia para el Xeneize: la lesión de Lucas Blondel, un futbolista que partido a partido ganaba mayor protagonismo en la propuesta de Diego Martínez. El lateral, de 27 años, sufrió un “esguince de rodilla derecha con ruptura del ligamento cruzado anterior”, según el parte médico de la institución. Y deberá transitar una extensa rehabilitación de alrededor de seis meses para volver a jugar oficialmente.
“Una tristeza muy grande. Él estaba triste, estaba dolido. Lo quiero mucho a él porque lo conozco hace mucho tiempo, pero es un chico muy querido dentro del plantel, además de ser un gran futbolista. Ojalá sea lo menos posible para que la baja no la sufra tanto el equipo. Pero la verdad que sí, estaba triste. Sus compañeros también”, expresó el DT, que ya lo había dirigido en Tigre.
Morena Beltrán, periodista y pareja del marcador de punta surgido de Atlético de Rafaela, ya había ofrecido grageas de la intimidad del jugador post impacto, a través de un posteo en la red social Instagram. Publicó una foto del jugador junto a la mascota que comparte y escribió: “Hoy es otro día” junto a un emoji de un corazón.
La cronista y analista ofreció nuevos detalles en su participación en el programa F90, por ESPN. “Lamentamos lo que pasó con Luquitas Blondel, le mando un abrazo grande, More”, le dijo el conductor Sebastián Vignolo. “Está muy bien, son cosas que pueden ocurrir”, relativizó su interlocutora, quien luego explicó cuándo advirtió su pareja lo que le había sucedido, repasando la secuencia con Oscar Ruggeri.
“Se le quedó enganchada la rodilla. Lucas le grita a (Cristian) Ferreira porque estaba al lado. Se le clavó el tapón y al toque se dio cuenta”, añadió. La lesión le llegaba en plena levantada, cuando se había impuesto en el elenco titular y justo en el umbral del inicio de la aventura internacional, con el debut de Boca en la Copa Sudamericana ante Nacional de Potosí.
No obstante, según Beltrán, Sonrisa no perdió el optimismo a pesar del largo camino que tendrá por delante para volver a jugar oficialmente, previo paso por el quirófano. “Lucas es muy positivo. Está intentando tranquilizar a los demás, porque también hay una familia que se preocupa mucho. Parte de la familia estaba en Rafaela por Pascuas y su papá, en Suiza”, concluyó quien mantiene una relación con el jugador desde fines de 2023.
El caso Blondel se da en medio de una ola de lesiones ligamentarias que azota al fútbol argentino desde comienzos de 2024. Son 18 confirmadas, aunque el doctor Jorge Batista, prestigioso profesional de Boca Juniors, advirtió que serían 19, con una a punto de confirmarse. “No veo una salida rápida, se seguirán rompiendo”, anticipó el médico, que indicó a la seguidilla de partido, las presiones y el estado de los campos de juego como factores que impulsan la “epidemia”.