Cayó el subcampeón de Europa. El Atlético de Madrid volvió a tener una cita con la historia en los octavos de final de la Champions League para eliminar por penales al Inter, una instancia en la que tuvo como protagonistas a Lautaro Martínez y Ángel Correa en el cierre del duelo disputado en el Estadio Cívitas Metropolitano.
Tras igualar 2-2 en los 180 minutos reglamentarios de la serie y los 30 respectivos del suplementario, el pitazo final del árbitro, Szymon Marciniak, llevó las acciones a la vía de los doce pasos. Las excelentes intervenciones de Jan Oblak para taparles los festejos a Alexis Sánchez y Davy Klaassen dejaron al elenco de Milán con la obligación de convertir en el último turno, a pesar de que Yann Sommer había desviado el intento de Saúl Ñíguez. La responsabilidad le quedó a Lautaro Martínez, la máxima figura de la visita.
Con toda esa mochila a cuestas, el Toro elevó el remate más de la cuenta sin poder direccionarlo contra los tres postes e inmediatamente se dio la vuelta para mirar si había algún problema con el punto del penal, mientras Oblak comenzaba a encaminarse para celebrar con sus compañeros el pasaje a los cuartos de final de la Liga de Campeones.
La frustración del argentino en su mejor temporada desde la llegada al fútbol italiano se enmarca en un curso en el que es el máximo artillero del Calcio y había participado en dos jugadas que pudieron finiquitar la eliminatoria antes de tiempo, pero distintos errores en las definiciones de sus compañeros impidieron obtener el boleto entre los ocho mejores del Viejo Continente. Para colmo, el ex futbolista de Racing falló un claro cabezazo a la salida de un córner en el alargue.
Cuando ya estaba regresando hacia donde estaban los otros jugadores del Nerazzurri, Lautaro recibió la banca de Ángel Correa (marcó su penal), quien detuvo su marcha de manera intempestiva para contener y abrazar a su ladero en la selección argentina después de la mala resolución en el cierre de la definición. Las dos caras de la moneda se juntaron en un destacado momento de lo sucedido en el Metropolitano, aunque el encuentro tuvo diferentes cuestiones llamativas que lo tuvieron como protagonista al punta del Inter, como así también al entrenador del Atlético, Diego Pablo Simeone.
* La asistencia de Lautaro Martínez a Marcus Thuram
El gol de Federico Dimarco parecía bajarle la persiana a la serie después del triunfo 1-0 logrado en Milán, pero el rápido descuento de Antoine Griezmann puso en partido al Colchonero hasta dejarlo a un gol de forzar el tiempo suplementario. Con el paso del cronómetro, el dueño de casa comenzó a desprotegerse en la última línea en la búsqueda de su segundo gol y le cedió la posibilidad a su rival, que lo perdonó por duplicado.
Lejos del andar goleador que lo llevó a alcanzar las 23 anotaciones en la Serie A, Lautaro Martínez se disfrazó de asistidor en la noche madrileña, propiciando tiros poco efectivos de Marcus Thuram y Nicolò Barella en cuestión de escasos segundos. La primera acción sucedió a los 75 minutos tras un rechazo defensivo de Francesco Acerbi. La pelota suelta le quedó al Toro, quien inició el contraataque a campo rival y se inclinó hacia el centro para permitir la diagonal de Thuram. El francés se filtró en la defensa Rojiblanca y recibió un pase magistral del argentino, pero el atacante se excedió en la potencia de su derechazo.
A los 80 minutos, el campeón del mundo con la Selección en el Mundial 2022 regresó a la acción para imponerse en el cuerpo a cuerpo a Rodrigo Riquelme y encarar con superioridad numérica frente al único futbolista del Atlético de Madrid que había quedado en el fondo, mientras Barella le picaba al vacío. Sin dudarlo, Lautaro ejecutó un envío en profundidad para quedar mano a mano contra el arquero. El mediocampista se fue contra un costado, le dio oportunidad de encimarlo a Pablo Barrios y, con un ángulo forzado, ensayó un disparo contenido por Sommer.
* La lesión del Cholo Simeone después del 2-1 anotado por Memphis Depay
Tantas ocasiones despilfarradas fueron pagadas a alto valor por el finalista de la edición pasada, que había sido derrotado por Manchester City en Turquía. A los 86‘, Memphis apareció para el 2-1, un resultado que extendió la historia a la prórroga. La celebración contó con un lesionado inesperado: el Cholo Simeone. El DT intentó salir a festejarlo con sus dirigidos, pero debió echarse para atrás porque sintió una molestia en una de sus piernas.
Más allá de esto, el Rojiblanco intentó llevárselo en el tiempo regular porque en el último instante logró una buena combinación entre Correa y Antoine Griezmann sobre el costado derecho. Este último cedió un pase a la llegada de Riquelme y, frente a frente con Sommer, elevó la pelota por encima del parante superior. Simeone, que seguía la jugada atentamente, se desplomó sobre el campo de juego en señal de lamento por lo que había fallado el mediocampista.
De igual manera, la clasificación solo sumó mayor dramatismo dado el resultado final y este viernes conocerá cuál será su rival en los cuartos, instancia en la que se podría medir con el París Saint-Germain (PSG), Bayern Múnich, Real Madrid, Manchester City, Barcelona, Arsenal o Borussia Dortmund. No hay restricciones con rivales del mismo país a partir de esta fase.
* La reacción del Cholo Simeone por la definición errática de Riquelme
* El resumen del triunfo por penales de Atlético de Madrid contra Inter