Racing se quedó con una nueva edición del clásico de Avellaneda al vencer como visitante a Independiente por 1 a 0, en el inicio de la séptima fecha de la Copa de la Liga. El único gol en el Libertadores de América lo convirtió Adrián ‘Maravilla’ Martínez, quien está cada vez más afianzado como goleador académico y sueña con llevar al equipo de Gustavo Costas a la cima del certamen.
El combinado albiceleste justificó la victoria gracias a la planificación de su entrenador, la producción de Bruno Zuculini, la calidad de Juanfer Quintero y la sólida línea defensiva que evitó los tímidos intentos de ataque del Rojo. Incluso la diferencia pudo ser más amplia, si la visita no hubiera perdonado al rival de toda la vida. Más allá del espectáculo, Lionel Miranda, quien ingresó en lugar de Agustín Almendra en la parte final del derby no dudó en burlarse de su ex equipo al asegurar que está “del lado correcto de Avellaneda”.
“Sabíamos que podíamos poner a la gente a nuestro favor. Ellos cantaron el primer tiempo un poco y después el equipo se plantó”, comenzó en su relato el volante sobre la experiencia vivida en la casa de sus vecinos. Y argumentó: “Es una revancha para mí, el año pasado la pasé muy mal. Gracias a Gustavo (Costas) tengo este presente. Puse mi granito de arena y estoy feliz”.
En su euforia por la victoria, la sexta de los últimos 9 duelos frente a Independiente, el Lolo dejó más de una frase que fue celebrada por los hinchas como si se trataran de goles del ex Defensa y Justicia. “Dejamos mudo al estadio otra vez. Voy ganando varios clásicos y la felicidad es enorme”, subrayó el mediocampista. Y continuó: “Se viven muy diferente los clásicos. Yo estoy en la vereda correcta. Siempre es lindo ganarles y más en la cancha de ellos. Cantaron en el primer tiempo un poco y después el equipo se plantó”.
“Ganar este clásico es una locura. Dejamos mudo este estadio otra vez. Ya me pasó otra vez en esta cancha, voy ganando varios clásicos. Estoy en la vereda correcta”, insistió antes de retirarse con el resto de sus compañeros y celebrar un triunfo inolvidable.
Los dirigidos por Gustavo Costas jugaron con inteligencia y se alzaron con la victoria con justicia. Las intervenciones de Maximiliano Salas, las proyecciones de Gabriel Rojas por la banda izquierda, la categoría de Juan Fernando Quintero y el liderazgo de Zuculini fueron algunos argumentos que marcaron la superioridad de Racing.
Tanto es así que a los 17 minutos del segundo tiempo, Maravilla Martínez recibió un excelente pase filtrado de Zucu, eludió con categoría a Rodrigo Rey y, tras la ratificación del VAR por un posible offside, silenció a la mitad de Avellaneda con el gol que marcó el triunfo de la visita.
“Estoy muy feliz porque sé que mi familia y mi gente está contenta. Esto es algo que no esperaba vivir”, dijo el propio Costas en conferencia de prensa. El DT de la Academia pudo cortar una racha negativa ante su eterno rival, ya que en sus dos ciclos anteriores había dirigido otros tres y nunca había podido ganar. “Lo dicen los números, la historia cambió mucho y cambiaron los clubes. Independiente antes era un lujo y nosotros éramos los humildes, no teníamos ni cancha para entrenar y ellos eran una institución ejemplar. A nosotros nos tocó caernos y ya nos levantamos”, analizó el ex central. Y agregó: “Viví la peor época de Racing e Independiente ganaba todo. Es un clásico, esa rivalidad la tuvimos siempre. No somos enemigos, somos rivales, cuando yo iba al colegio la mayoría de la gente era de Independiente en Avellaneda, era difícil ser hincha de Racing en ese momento”.
Por último, si bien afirmó que no tenía ganas de analizar el encuentro sino de festejar, Costas sentenció: “Los clásicos son campeonatos aparte, podés jugar bien, mal o regular, pero hay que ganarlos. Ellos entraron mejor en los primeros 5 minutos de cada tiempo, pero después Racing manejó la pelota y los tiempos y pienso que podríamos haber hecho un gol más”.