Luego de lo que fue la bochornosa salida de los familiares y amigos del plantel de la selección argentina Sub 23 tras el empate contra Venezuela en Caracas, ahora se registró otro lamentable hecho en el Preolímpico. Endrick, estrella brasileña del Palmeiras que fue comprado por Real Madrid, denunció un hecho de racismo contra su círculo íntimo luego del triunfo de Brasil ante la Vinotinto. Lo hizo a través de un video que luego borró de sus historias de Instagram.
“Disculpa pa por ese momento. Disculpa padrino por ese momento. Infelizmente pasó con mi familia y amigos, pero Dios sabe todas las cosas”, fue el mensaje que compartió la joya de apenas 17 años que anoche asistió para el gol del 2-1 definitivo de los brasileños, que este domingo definirán su clasificación a los Juegos Olímpicos de París frente a la Argentina de Javier Mascherano.
El video mostró a un fanático venezolano con la camiseta puesta que les enseñaba la foto de un mono en su teléfono celular y también hacía ademanes de cara a la tribuna en la que estaba la familia de Endrick y de otros futbolistas de la Verdeamarelha. “¡Racista, racista!”, fue la respuesta de ellos. Seguramente por recomendación de las autoridades de Brasil, optó por eliminar la publicación en la que había citado a la cuenta de la Conmebol.
Endrick convirtió en los dos primeros partidos de Brasil en el certamen (1-0 a Bolivia y 2-0 a Colombia), pero luego no volvió a inflar las redes. En el debut por la fase final (derrota 1-0 ante Paraguay), falló un penal y fue partícipe de una jugada insólita en la que asistió a John Kennedy, verdugo de Boca en la Libertadores.
ENDRICK HABLÓ DE BOCA
—Jugaste en la Bombonera con Boca. ¿El estadio qué te pareció? ¿Te gustaría volver a jugar ahí?
—Espectacular. Creo que jugué dos minutos ahí y el tiempo que entré me quedé con la piel de gallina. Es un equipo gigante, muy grande. Espero que les vaya muy bien y, si Dios quiere, podamos encontrarnos nuevamente en la Copa Libertadores.
El crack brasileño recordó la semifinal de la edición pasada de la Libertadores entre Boca y Palmeiras que terminó siendo favorable al equipo argentino en tanda de penales. A la figura del Verdao lo hicieron ingresar en los segundos tiempos y complicó bastante a la defensa del cuadro dirigido en ese entonces por Jorge Almirón. Lo que no habrá es revancha: mientras los paulistas disputarán este año la Libertadores, el Xeneize hará lo propio pero en la Sudamericana. A lo sumo puede reeditarse el cruce si Palmeiras queda tercero en su zona de Copa y es sorteado en una hipotética llave de Sudamericana.