El 22 de enero, Luciano Perdomo, capitán de Chacarita, uno de los candidatos en la Primera Nacional, sufrió un grave accidente automovilístico camino a la práctica que se realizaba en el predio de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) en Moreno. Los informes indicaron que el impacto se dio contra un vehículo de gran porte. Y el mediocampista, de 27 años, terminó internado en terapia intensiva, con fracturas en múltiples huesos de la cara y un cuadro inicial angustiante. 17 días después de ese siniestro vial el mediocampista rompió el silencio.
“Estoy feliz, como un nene, volviendo a nacer y me siento con el pecho inflado para poder encarar esta etapa de la recuperación. Estoy muy agradecido a todo el mundo del fútbol por el apoyo que me dio”, confesó en una entrevista con radio La Red.
“Lo único que me acuerdo es el pantallazo del camión y fue una negligencia mía y me hago cargo. No sabía decirte bien si fue una falla de la camioneta o si fui yo”, afirmó sobre el accidente. “No entiendo aún lo que pasó”, añadió.
Una vez que fue internado estuvo en coma y siete días más tarde despertó. “Estuve una semana en coma inducido, del 22 al 29. No me acuerdo de nada. El martes 30 ya estaba consciente, no entendía lo que había pasado. Las cosas siempre pasan por algo. Lloré mucho. Estuve mucho en coma”, relató.
Sobre su rápida recuperación, indicó que “los médicos me dijeron que esto fue un milagro y que tengo un Dios aparte. No pueden creer la recuperación que tuve. Porque como llegué ahí, que a los 10/12 días me pasaran a sala común, los médicos se sorprendieron por mi evolución. Se frenaban en mi habitación y decían ‘Luciano, no lo puedo creer’. Ellos me filmaban porque no podían creerlo”.
“Desde el día que me levanté de la cama el médico que me dijo ‘esto va a depender de vos’. Cuando estuve en una sala común me puse a caminar por los pasillos”, recordó. “Si bien no tengo una fractura grande, tengo que hacer una recuperación. Tengo microfracturas en la cara. Nada grave. No me tengo que volver a operar”, explicó sobre su estado actual.
Sobre un posible retorno a los campos de juego sostuvo que “ya les pregunté a los médicos cuándo puedo volver a jugar, pero me dijeron que tenga paciencia. Por ahora solo puedo hacer bici y pesas. No sé cuándo volveré a jugar”. Pero sueña con poder regresar cuanto antes: “Dormí 10 días y soñé 5 veces con volver a estar dentro de una cancha. Si viene un gol, bienvenido sea”.
“Toda esta situación fue muy difícil y muy dura, pero estoy muy entero, con muchas fuerzas, como un toro para salir adelante y muchas ganas. Salí de una difícil y le tengo que meter”, destacó.
En tanto que toda esta experiencia lo hizo reflexionar: “Te replanteás hasta la posibilidad de tomarte un mate. Todo. Hay frenar un poco las cosas, bajar un cambio y sobre todo saber que somos humanos”.
Les agradeció a todos los que estuvieron pendientes de su situación y admitió que “sentí el apoyo del mundo del fútbol. La cantidad de lágrimas que derramé por los mensajes que me dieron los colegas... Uno sabe que hace las cosas bien, pero todos estuvieron pendientes de lo que necesitaba la familia”
“Valoro lo que tengo y bajo un cambio. En esta profesión faltás un doble turno y te castigás mucho. Hay que valorar todo diez veces más y disfrutar de los grandes momentos. No me castigo tanto en el día a día. Hay que disfrutar de que hacemos lo que amamos”, concluyó.