El caso Dani Alves tomó un nuevo giro ante las recientes declaraciones y acontecimientos que rodean su figura y el proceso judicial en curso. La evolución de su testimonio siempre fue muy volátil a lo largo de la investigación. El ex defensor brasileño cambió su versión de los hechos en varias ocasiones y, actualmente, el protagonista sostiene que hubo relaciones sexuales con la víctima pero alega que estas se dieron bajo consentimiento mutuo.
A pocos días de que la resolución del veredicto, aseguran en Brasil que la estrategia de los abogados defensores del jugador será decir que Alves se encontraba bajo los efectos del alcohol al momento del hecho y eso le impide recordar lo sucedido con la denunciante. Fuentes vinculadas al caso confirmaron al medio brasileño UOL que el carrilero afirmará que no tenía noción de sus actos mientras estaba en el establecimiento bailable. De confirmarse la modificación del testimonio, será el quinto cambio de versión desde el inicio del caso. “La estrategia de los abogados defensores del jugador será decir que Alves estaba borracho y no recuerda lo ocurrido en la discoteca Sutton”, señalaron en el medio brasileño.
La situación jurídica del zaguero se complica cada vez más ya que se encuentra en prisión provisional desde enero de 2023 en el centro penitenciario Brians 2, en España. Sus intentos por recuperar la libertad a través de diferentes recursos legales no tuvieron los resultados que esperaba, puesto que la justicia desestimó todas las apelaciones presentadas por su defensa de cara al juicio está programado para llevarse a cabo del 5 al 7 de febrero en Barcelona.
En el repaso de las anteriores cuatro versiones, el portal sudamericano recuerda que Alves afirmó inicialmente que no conocía a la denunciante, luego declaró que se metió con ella el baño pero no ocurrió nada. El relato volvió a modificarse cuando afirmó ante el Tribunal que sólo hubo sexo oral y hubo un nuevo cambio cuando reconoció un acto sexual con penetración, pero con consentimiento.
La Fiscalía, según informes de UOL, contempla solicitar una pena de 12 años de cárcel que corresponde al máximo previsto por la ley española para este tipo de delitos. En paralelo, la defensa buscó sin éxito un acuerdo con la acusación que pudiera mitigar la eventual condena. En caso de un veredicto de culpabilidad, se espera que los representantes del jugador invoquen una figura del sistema legal español conocida como “el atenuante de reparación del daño causado”, que podría reducir el castigo en hasta un 25%.
Este apartado se habría aplicado tras el pago de 150 mil euros de indemnización a la justicia española, cantidad en la que habría contribuido Neymar y su familia, dados los embargos que pesan sobre los bienes de Alves por procesos en Brasil.
Al mismo tiempo, El Periódico de España asegura que a partir del próximo 5 de febrero a las 10 de la mañana (hora de España) cuando se inicie el juicio, se espera que por el banquillo de los testigos pase Joana Sanz, quien era la pareja formal de Alves al momento del escandaloso suceso. La modelo podría aparecer en algunos de los tres días pautados para las presentaciones (5, 6 y 7 de febrero).
“La actual pareja sentimental del exfutbolista brasileño ha ido a visitarlo en varias ocasiones a la prisión. De hecho, a pesar de que anunció su intención de divorciarse y con este fin llegó a contactar con una abogada, de momento no ha iniciado los trámites”, afirmaron en este medio. Joana fue propuesta por la defensa del ex futbolista del Barcelona y afirman que será una de las 30 personas que se estiman que pasarán para brindar testimonio.
Más allá del proceso principal, la Fiscalía Provincial de Barcelona inició diligencias en relación con la difusión de un vídeo de la supuesta víctima que circuló en Instagram, publicado por la madre de Dani. Este acto ignoró las directrices judiciales que ordenaban no revelar información que permitiera identificar a la denunciante en casos de delitos contra la libertad sexual.
Maria Lucia Alves, con su acción, no solo expuso datos de la denunciante sino que infringe el estatuto de la víctima, arriesgándose a enfrentar cargos por delitos contra la integridad moral y revelación de secretos. En el controversial fragmento audiovisual, la madre del jugador intentó desacreditar afirmaciones sobre el estado anímico de la víctima quien según reportes padeció episodios de ansiedad y depresión a raíz del incidente. Frente a esto, la parte acusadora anunció que emprenderá acciones legales.
El proceso contra Dani Alves no sólo se centra en la determinación de su culpabilidad, sino también en la protección de la identidad de la víctima cuya imagen se busca resguardar durante el juicio para evitar un circo mediático. La Audiencia Provincial de Barcelona será el foco de la atención internacional y en las próximas semanas crecerá en relevancia cuando se inicie el proceso sobre la leyenda del blaugrana.