Hubo señales esperanzadoras en el estado de saludo de Wilson Fittipaldi, quien se encuentra internado por haberse atragantado con un trozo de carne en el almuerzo de Navidad. El ex piloto de Fórmula 1 de 80 años sufrió convulsiones y luego un paro cardíaco. Tras ser reanimado fue hospitalizado y ahora llegaron buenas noticias desde Brasil que dan cuenta de una leve mejora en el paulista, que junto a su hermano Emerson, gestaron un equipo de su país para competir en la Máxima en los años setenta y principios de los ochenta.
Los médicos decidieron retirarle los sedantes a Wilson, quien mostró un avance en su cuadro, según informó desde el vecino país el medio especializado Grande Premio. Fittipaldi se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Prevent Sênior, en Itaim Bibi, San Pablo, donde llegó pasado el mediodía del 25 de diciembre último, cuando padeció un paro cardíaco ya que se quedó sin oxígeno.
Los médicos sedaron a Wilson y aguardaron hasta comprender su condición neurológica, pero al mostrar una ligera mejora le sacaron los sedantes en la tarde del domingo. Fue el tercer intento de los médicos para confirmar su evolución. Fittipaldi se despertó por unos momentos, pero no se comunicó. Ahora, los profesionales de la salud están esperando que la condición evolucione para evaluar el estado neurológico.
Wilson y su hermano Emerson, bicampeón mundial de F1, son dos instituciones del deporte en el vecino país ya que fueron grandes emprendedores abajo de los autos de carrera. Su familia está ligada a este deporte desde hace casi un siglo y su padre, Wilson Senior, fue fundador de la Confederación Brasileña de Automovilismo. La capital paulista es sede del Autódromo José Carlos Pace de Interlagos, donde corre la Máxima comenzó a correr allí en 1972.
El estado de salud del ex corredor fue seguido de cerca por los fanáticos y en especial los brasileños por el cariño que le tienen a la familia Fittipaldi. Emerson fue su primer campeón mundial en la Máxima y abrió los caminos para que sus compatriotas siguieran sus pasos. Desde la formación en Inglaterra con la Fórmula 3 Británica hasta llegar a la cúspide que también supieron alcanzar, pero en tres ocasiones, Nelson Piquet, campeón en 1981, 1983 y 1987; y Ayrton Senna, coronado en 1988, 1990 y 1991.
Aunque también los hermanos Fittipaldi se destacaron al fundar su equipo en la F1 que ayudó a pilotos de su país. La escudería que primero se llamó Copersucar, por su principal sponsor, una cooperativa brasileña de azúcar y alcohol, luego tuvo grandes problemas financieros y terminó quebrando a fines de 1982. Luego de perderlo casi todo a nivel económico, Wilson y Emerson supieron rehacerse y el automovilismo los arropó para poder comenzar de cero.
Emerson pasó a correr en la IndyCar y pudo rehacer su vida en los Estados Unidos. Mientras que Wilson corrió en el Stock Car, la categoría más fuerte de su país y también compitió en carreras de larga duración. Además, acompañó a su hijo, Christian, quien quiso seguir sus pasos y luego de ser campeón de la Fórmula 3 Sudamericana en 1990 y de la Fórmula 3000 (actual Fórmula 2) en 1991, debutó en la F1 en 1993.
La herencia por este deporte llegó a los nietos de Emerson y Pietro también corrió en F1 cuando a finales de 2020 reemplazó al accidentado Romain Grosjean. Su presencia en las últimas dos fechas de esa temporada significó para la familia Fittipaldi ser la única con tres generaciones de pilotos en haber competido en la Máxima.