El campeón de la Liga Profesional y el Trofeo de Campeones será uno de los últimos equipos en volver al trabajo (iniciará el 6 de enero y luego viajará rumbo a Estados Unidos para realizar la parte fuerte de la pretemporada en el impactante complejo del IMG Academy), pero tanto la secretaría técnica (encabezada por Enzo Francescoli y secundado por Leo Ponzio) como la dirigencia se mueven en el mercado de pases para buscar dar un salto de calidad de cara a la Copa Libertadores, el gran objetivo en este 2024.
Al margen de nuevo plan reducción que propone Martín Demichelis, la salida del venezolano Salomón Rondón cambió un poco los planes en los pasillos del Monumental y, tal como informó Infobae a mediados de diciembre, en el Millonario estudian diferentes variantes para reforzar la ofensiva.
Aunque una idea es tratar de moldear a Facundo Colidio como un nuevo Lucas Beltrán, se busca un delantero con gol y que también tenga facilidad para asociarse al esquema de juego diseñado por Micho. Uno de los nombres que figuraban en carpeta y que más ruido hizo fue el de Lucas Alario. Pese a su deseo de retornar, lo cierto es que por estas horas está muy cerca de llegar a un acuerdo económico con Inter de Porto Alegre (también preguntó por su situación Cruzeiro de Brasil). “Lucas va a salir este mercado de pases. Vamos a resolverlo esta semana”, le advirtieron a este medio desde el círculo íntimo del futbolista.
Ante este escenario, sumado a que la variante del uruguayo Matías Arezo parece haberse enfriado ya que el Cacique Medina lo tendría en cuenta para intentar mantenerse en la máxima categoría con el Granada de España, salió a la luz otro nombre que gusta en River Plate.
Se trata de José Manuel López, al talentoso goleador que actualmente se desempeña en Palmeiras de Brasil y que explotó con la camiseta de Lanús. Vale recordar que el Flaco ya estuvo en la órbita del Millonario en mayo del 2022 para reemplazar a Julián Álvarez.
El correntino de 23 años hoy por hoy no es la primera opción en la delantera para el portugués Abel Ferreira (aparece por detrás de Rony o Endrick, la joven joya que adquirió el Real Madrid), lo que podría facilitar su salida del Verdao. En la pasada temporada disputó un total de 40 partidos, en los que marcó ocho goles y brindó dos asistencias. Un dato dentro de esta operación es que el Granate aún conserva un 30 por ciento de su ficha.
El atacante, que cuenta con un letal cabezazo y, pese a su altura (1.88 metros), posee una muy habilidosa zurda, podría encajar a la perfección dentro de la idea de Martín Demichelis. En la entidad del sur del Gran Buenos Aires disputó un total de 59 partidos, en los que marcó 22 goles y brindó 5 asistencias. Su explosión fue en la Liga Profesional del 2021, donde aportó un total de 13 gritos (ninguno de penal), lo que lo posicionó entre los máximos artilleros del torneo. En el conjunto de San Pablo ganó dos Serie A y una Supercopa de Brasil.
El correntino nacido el 6 de diciembre de 2000 inició su vínculo con el fútbol a los siete años en el club El Progreso de su ciudad natal. Su potencia y habilidad llamaron la atención de Independiente, entidad que lo cobijó en su pensión hasta 2016. Cuando pisó la Sexta División fue convocado por Ariel Holan (por entonces DT del Rojo) para participar de algunas prácticas con el primer equipo.
Sin embargo, cuando su carrera no paraba de subir sufrió un inesperado revés. Estuvo un año prácticamente parado por un golpe en la espalda que le impedía jugar. En el medio hubo un cambio de conducción en Avellaneda y los encargados de tomar decisiones optaron por prescindir de sus servicios y dejarlo libre.
Tras algunos meses consiguió una prueba en Lanús. En 2017 jugó para la Quinta División y al año siguiente en el Granate decidieron darlo a préstamo al Club Atlético Colegiales de Tres Arroyos, donde consiguió el ascenso a la Primera División de la Liga Regional y fue el goleador del equipo. En su vuelta a la entidad de Sur llamó la atención de Luis Zubeldía y con el Pepe Sand como socio no paró de aportar goles.