Con su típico look despeinado, pero a diferencia de sus compañeros, con un saco en pleno calor, Marcelo evidencia sus ganas de discutir cada pregunta o cada comentario del cronista, aún en una noche muy feliz, en la que su equipo, el Fluminense, consiguió la clasificación al Mundial de Clubes y cuando el marcador se abrió gracias a un penal por una falta que le hicieron dentro del área.
-Ahora están un paso más cerca de ser campeones del mundo. ¿Creés que eso es posible?
-Es posible, pero ahora déjame festejar este triunfo y tenemos total respeto por quien sea nuestro rival en la final y que será, en cualquier caso, muy difícil.
-Ganaste ya cuatro veces el Mundial de Clubes pero siempre del lado europeo, con el Real Madrid. ¿Es distinto cuando se encara este torneo del lado sudamericano?
-Creo que no es distinto porque los dos tienen muchas dificultades que atravesar, ya sea ser campeón de Europa como de Sudamérica requiere de mucho trabajo y los dos saben que es así.
-¿Está bien festejar tanto un pase a la final siendo un equipo sudamericano, con la historia que tiene este continente en el fútbol?
-No hay más que fijarse en cómo le fue a muchos equipos sudamericanos en este torneo mismo, hace poco. Festejamos porque dimos un paso muy importante en un torneo muy difícil.
-¿El camino del Fluminense es lo que hicieron en el segundo tiempo, más que el primero?
-¿Qué clase de pregunta es esa? Para mí, jugamos todo el partido igual.
-Bueno, tengo derecho a opinar diferente, ¿no?
-Sí, es su opinión. La mía es que jugamos siempre igual.
-Para mí, hubo mucha diferencia entre lo que jugó Fluminense en el primer tiempo, cuando Al Ahly llegó mucho hasta el arco de Fabio, y el segundo, en el que dominó casi completamente.
-Es tu modo de ver. En mi modo de ver, hemos jugado igual todo el partido ante un equipo que, como nosotros, estaba en una semifinal de un Mundial y no es fácil. Y no creo que haya entre los dos una diferencia muy grande.
-Volviendo a lo que te preguntaba sobre el juego de ustedes. ¿El camino es el del toque, reducir los espacios de los rivales, no dejarlos jugar al tener ustedes una alta posesión?
-Vamos a ver. Nosotros hacemos nuestro juego e intentamos ser Fluminense-dependientes.
-Siendo un lateral, el partido contra Al Ahly se abre por un penal que te hicieron.
-Sí, me tuvieron que hacer falta dentro del área después de una gambeta corta, pero lo importante es el despliegue que hicimos, moviendo la pelota de un lado al otro, y eso es producto del gran trabajo que venimos haciendo en lo colectivo. Eso es lo que me permitió hacer la jugada del penal.
-Si tuvieras que comparar a Al Ahly con Boca, contra el que jugaste hace poco la final de la Copa Libertadores, ¿cuál te pareció más difícil?
-No soy yo el que los debe comparar.
-Pero tu opinión, ¿cuál es?
-No tengo opinión.
-¿Cuál es el secreto para que Fluminense haya llegado hasta acá, una final de un Mundial de Clubes?
-Muchas cosas. Primero, la convicción de que podemos. También los sueños de llegar lejos cuando se fue armando este grupo de jugadores. Luego mucho coraje para jugar, una idea clara por parte del entrenador, mucha movilidad entre nosotros, jugadores de muy buena técnica y de mucho futuro entre los que son jóvenes, y también hemos conseguido independencia de quién sea nuestro rival, porque tenemos un estilo propio y siempre queremos ser Fluminense.
-Vinieron cerca de tres mil hinchas desde Brasil, aunque seguramente ahora vendrán muchos más para la final.
-Sí, y estoy muy feliz y sabemos que los que vinieron hicieron un enorme esfuerzo y también que muchos otros no pudieron viajar, pero por todos ellos trataremos de dar lo máximo en la final.
-¿Sabés que Juan Román Riquelme ganó ayer las elecciones en Boca?
-Sí, Riquelme es muy amigo mío y estoy muy contento por él. Sabía porque seguí las informaciones y creo que ahora Boca va a estar mucho mejor porque él es increíble.