Se conoce a Arrecifes como la “Cuna de Campeones” del automovilismo nacional y este domingo la ciudad bonaerense conquistó otro título de la mano de José Luis Di Palma hijo, más conocido como Josito. Se trata de la tercera generación de campeones nacionales en pista de la “Dinastía”. A sus 34 años, el nieto del inolvidable Luis Rubén Di Palma se consagró en el Top Race luego de ganar la última final del año corrida en el Autódromo de Concepción del Uruguay.
Josito llegó como líder del campeonato al cierre en el escenario entrerriano y con su Fiat Cronos del equipo Octanos Competición definió la corona con el bicampeón saliente, Diego Azar, que corre con un Toyota Camry, de la escudería oficial de la marca japonesa.
Di Palma hizo la pole positions y fue tercero en el Sprint, donde en la grilla de partida se invierten los ocho primeros lugares de la clasificación. En la final partió primero y se llevó el triunfo en la competencia disputada sobre 21 giros. En el podio lo escoltaron el propio Azar y Marcelo Ciarrocchi, quien llegó como el tercero discordia, aunque con pocas chances a la definición con su Ford Mondeo del Lincoln Motorsport.
Luego fue entrevistado y se quebró. “Estoy muy emocionado. Es mucho esfuerzo, decisiones. Gracias a mis hijos que son el motor de mi vida y toda la gente que me acompaña. Fue un año turbulento”, dijo en Carburando.
“El que me conoce sabe del esfuerzo que hago. A lo mejor no les gusta mi manera por ser directo y demás, pero lo importante no es ganar un campeonato sino intentar ser mejor persona el año que viene”.
“Esto es un logro que queda en la vitrina y es algo que quería conseguir, pero en definitiva es algo material. Lo importante son estos chicos que están acá, Vicente, Valentino y Donato y me focalicé en eso para lograr este título”.
Di Palma plasmó cinco victorias sumando sus éxitos en las finales y en el Sprint sabatino. Luego de 20 temporadas pudo conseguir su primer título nacional. Debutó en el TC Pista en 2004 con apenas 15 años. Luego corrió en la Fórmula Renault (hoy Fórmula Nacional) y en el TC logró ocho triunfos. También corrió en el TC 2000, donde debutó de forma regular en 2007 bajo la estructura general de Oreste Berta.
Desde muy chico el destino estuvo marcado para Josito al crecer en una familia de pilotos en la que además su tía Andrea también corrió en autos. Desde aquellos días en el taller de su abuelo mamó el amor por el automovilismo. “De chiquito, mi abuelo me daba su auto de carrera para ir a cargar nafta una estación de servicio teniendo diez años. ¡Una locura! Pero bueno, cosas que a lo mejor no sé si son normales, pero uno que la vivió de chico fueron casi como normales”, recordó en una entrevista con Infobae.
Sobre la presión de llevar ese apellido reconoció que “me cuesta. Constantemente para uno la parte económica es muy determinante y tenés que estar rindiendo examen todos los domingos. Si largás último tenés que hacer una remontada, si largás primero tenés que ganar, y si venís al Top Race tenés que hacer el “1″ (mejor tiempo clasificatorio) y no es así. Hay un montón de pilotos igual o mejores que uno, y uno quiere aprender de ellos para ganarles. Pero bueno, es un poco el automovilismo de hoy que es bastante feo. Hasta en el fútbol pasa que un técnico pierde dos partidos y lo echan. Es el presente que se está viviendo”.
Es la tercera generación de campeones nacionales en pista y a nivel de apellidos ilustres del automovilismo argentino, por ahora los Di Palma son el único clan en conseguirlo. El recordado Luis Rubén fue campeón en el TC (1970 y 1971), TC 2000 (1983), Fórmula 1 Mecánica Argentina (1974 y 1978), Sport Prototipos (1971 y 1972) y Supercart (1993). José Luis Di Palma, padre de Josito, se consagró en la Fórmula 2 Nacional (1986) y también obtuvo la corona en la Fórmula 2 Británica en 1994. Marcos en el Supercart (1992) y Patricio en la Clase 3 de Turismo Nacional (2005).
Otros apellidos emblemáticos en el plano nacional fueron campeones, pero no con tres generaciones. Por nombrar algunos casos, los Risatti, Ricardo I fue campeón del TC en 1938, pero recién su bisnieto, Caito, se consagró a nivel internacional en la Fórmula 3 Española en 2006. En la familia cordobesa de Laboulaye también corrieron Jesús Ricardo conocido “Kelo” en los años sesenta y Ricardo II en los ochenta y noventa. Mientras que los Pernía, Vicente Alberto fue subcampeón del TC en 1997, pero Leonel es tricampeón del TC 2000 y bicampeón de la Clase 3 de TN y su hijo Thiago logró el cetro en la Fórmula Nacional en 2022.