Es cierto que Alemania pegó rápido en el Mundial Sub 17 y logró ponerse arriba en el marcador cuando todavía el reloj no había llegado a los diez minutos del primer tiempo. Pero para ese momento de la semifinal, Argentina ya había generado la jugada de mayor riesgo del trámite en los pies de su capitán Claudio Echeverri.
El conjunto europeo sacó del medio para iniciar el juego en el Manahan Stadium de la ciudad de Surakarta y la pelota fue a parar a los pies del defensor del Nürnberg, Fin Jeltsch, quien ensayó un despeje largo para buscar a los atléticos delanteros alemanes. Pero el Diablito fue más rápido...
El delantero de River Plate evitó el envío futbolista rival, la fortuna quiso que la pelota le cayera de frente y tras el control quedó inmediatametne mano a mano con el arquero. Con una finta, dejó en el camino a Konstantin Heide y se posicionó rumbo a un arco vacío. El propio Jeltsch retornó a toda velocidad para cubrir la mayor porción de su propia valla, algo que le acortó el ángulo de definición a Echeverri, quien le pegó y terminó dejando el balón desde el costado externo de la red.
El encuentro, que terminó 3-3 en tiempo regular, dejó un sabor agridulce a los dirigidos por Diego Placente. Argentina jugó mejor, pero tras ponerse 2-1 arriba en el marcador cometió dos errores en nueve minutos que pagó demasiado caro. A los 57 minutos, Jeremías Florentín quiso salir jugando desde el arco con el pie, pero su pase terminó en los pies del goleador alemán Paris Brunner. El del Borussia Dortmund se acomodó y sacó un excelente remate para poner las cosas 2-2.
El reloj estaba sobre los 68 minutos cuando llegó otro cachetazo tras una nueva falla en el fondo. El centro del capitán Noah Darvich desde la izquierda cayó en los pies de Juan Villalba dentro del área, pero el defensor de Vélez no llegó a despejar bien y la pelota quedó en la cabeza de Max Moerstedt que firmó lo que sería el 3-2.
El árbitro portugués Joao Pinheiro adicionó ocho minutos y Argentina tuvo la chance del empate por duplicado en ese lapso, primero, tras una buena jugada del Diablito Echeverri que tapó el arquero Konstantin Heide. El guardametas del Unterhaching volvió a lucirse segundos más tarde para evitar la caída de su valla luego de una magistral jugada individual de Franco Mastantuono. Sin embargo, Heide no pudo contener el 3-3 que marcó Agustín Ruberto en los segundos finales del duelo.
Tras ese grito del atacante de River Plate, Placente envió a la cancha al arquero suplente Franco Villalba para la tanda de penales. “Apenas empatamos el partido le dije a Diego que me pusiera porque me tenía fe para los penales, pero lamentablemente no pudimos ganar. Esto va a doler mucho, teníamos una ilusión muy grande”, reflejó el futbolista de Vélez tras la derrota en los penales.
Villalba estuvo cerca de tapar el primer disparo de Eric Da Silva Moreira, detuvo el lanzamiento de Finn Jeltsch y adivinó la intención de Fayssal Harchaoui que finalmente significó el tercer gol de los alemanes. Sin embargo, Heide tapó los tiros de Echeverri y Mastantuono para darle el boleto a la final a los europeos.
“De los pateadores conocía poco. Encima desde que empezó el mata-mata me había puesto a estudiar a algunos rivales, pero los que más pateaban de ellos habían salido. Estuvo complicado. Estuve cerca en tres, creo, pero no pude atajar. Contento del grupo que formamos, unos chicos muy buenos y uno se queda con esas cosas. Esto va a doler y va a seguir doliendo toda la vida. Un Mundial Sub 17 no se juega todos los días. Competir en el nivel de elite tiene estas cosas, por más que sea victoria o derrota tenés que seguir pensando en lo que viene. Vamos a dar lo mejor en el partido que viene”, aclaró Villalba.
El objetivo del plantel que comanda Placente era el de hacer historia conquistando la única corona que le falta a la selección masculina de fútbol del país. Desde que se inició este certamen juvenil en 1985, Argentina colecciona un trío de terceros lugares como mejores resultados tras lo hecho en Italia 1991, Ecuador 1995 y Finlandia 2003.
Al mismo tiempo, en los cuatro mundiales Sub 17 que se disputaron en la última década, Argentina finalizó en el cuarto puesto en Emiratos Árabes Unidos 2013, quedó afuera en fase de grupos sin sumar puntos en Chile 2015, no clasificó para India 2017 y fue eliminada por Paraguay en octavos de final de Brasil 2019.
Ahora deberá igualar lo hecho en 1991, 1995 y 2003 el próximo viernes (desde las 9 de Argentina) cuando juegue el choque por el tercer lugar ante Mali, que cayó ante Francia en la otra semifinal.