Horas después del histórico partido que ganó la selección argentina en el Estadio Maracaná contra Brasil por la sexta fecha de las Eliminatorias Sudamericanas, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) emitió un comunicado a través de su página oficial en el que se pronunció sobre la grave agresión que ejecutó la Policía Militar de Río de Janeiro sobre los fanáticos argentinos en una de las gradas.
El ente que regula el deporte brasileño afirmó que “la organización y planificación del partido fue realizada cuidadosa y estratégicamente por la CBF, en conjunto y en constante diálogo con todos los órganos públicos competentes, especialmente la Policía Militar del Estado de Río de Janeiro”. Sin embargo, hubo un cruce de versiones entre lo que planteó la CBF y unas palabras de las fuerzas de seguridad en la televisión brasileña.
Al mismo tiempo, la entidad quiso dejar en claro que estaba en contra de las declaraciones realizadas por el coronel Ferreira, Jefe del batallón policial, quien afirmó que el problema radicó en tener un sector de aficionados mixtos en la tribuna. “Notamos que la organización del evento vendió entradas en el estadio de forma mixta. Esto supuso un gran obstáculo para la seguridad privada, que solicitó refuerzos a la Policía Militar. Logramos estabilizar los disturbios mediante el aislamiento físico con la policía. Normalmente, en todos los partidos que se disputan aquí, hay un espacio para el visitante y un espacio para el equipo local. Hoy la dificultad fue la venta mixta de entradas en el Maracaná”, señaló a SporTV según replicó el diario Lance.
En relación a ello, la Confederación Brasileña aclaró que el hecho de que haya aficionados mixtos “siempre ha sido con conocimiento de la Policía Militar de Río de Janeiro y otras autoridades públicas, como ocurre en las Eliminatorias, en el Mundial, en la Copa América y otras competiciones”. Además, destacó que “otros partidos entre Brasil y Argentina, incluso con mayor atractivo, como la semifinal de la Copa América 2019, también se jugaron con afición mixta”.
“Este no es un modelo inventado o impuesto por la CBF. Es decir, todo el plan de acción y seguridad fue elaborado considerando la clasificación del juego como rojo y con la presencia de aficionados mixtos, tanto es así que 1050 guardias de seguridad privados y más de 700 policías militares de la Policía Militar de RJ trabajaron para asegurar el partido. Por lo tanto, la CBF reafirma que el plan de acción, seguridad y operación para el partido fue seguido estrictamente, aprobado por la Policía Militar de RJ y otras autoridades”, remarcó.
A su vez, también aclaró que la única advertencia que recibió la CBF durante los días previos al partido fue, una recomendación del Ministerio Público, la Fiscalía 2ª para la Protección Colectiva del Orden Urbano de la Capital, para que no se utilizara en los partidos de fútbol del 2023 el formato de entradas electrónicas mediante la utilización de QR en el dispositivo celular como sucedió en la final de la última edición de la Copa Libertadores: “No se celebren partidos de fútbol en 2023 con el formato de poner a disposición la totalidad de la carga de entradas a través de una entrada electrónica presentada mostrando el teléfono móvil, como ocurrió en el partido de la final de la Copa Libertadores el 4 de noviembre de 2023”. El comunicado recibido agregaba: “Exijan a los aficionados que se acerquen a los molinetes con una prueba física (billete de papel y/o carné de socio del aficionado) de que tienen una entrada para poder acercarse a los molinetes del Estadio Mário Filho - Maracanã, con el fin de evitar la invasión de aficionados que no tienen entradas para asistir al partido”.
Finalmente, la CBF destacó que los planes de acción y seguridad “fueron aprobados sin reservas ni recomendaciones por parte de las autoridades de seguridad pública (Policía Militar de RJ, SEPOL, Ministerio Público, Cancha de Fanáticos, Guardia Municipal, CET-RIO, Subprefectura, Concesionaria del Maracaná, SEOP, etc.), incluyendo la Policía Militar de RJ”.
“El lunes (20), el plan operativo del juego también fue aprobado sin reservas ni recomendaciones en la reunión celebrada en el Estadio Maracaná, con la presencia de la CBF, representantes de la Conmebol, la Policía Militar de RJ, las empresas responsables del operación Maracaná, y que operan más de 70 juegos en el estadio por año, y otras autoridades públicas”, sentenció el comunicado.
Cabe aclarar que, según las declaraciones que hizo en zona mixtas Rodrigo Paiva, jefe de comunicación de la máxima entidad del fútbol brasileño, la CBF no contó con gente propia para organizar el partido y contrató al Consorcio Maracaná para que se hiciera cargo del operativo de seguridad: “Contratamos al Consorcio Maracanã y toda la operación fue realizada por el Consorcio. El primer ministro participó en todo, sabía cómo iba a ser. No es la CBF la que tiene que medir el riesgo, ni siquiera tiene la estructura para evaluarlo”.
Sin embargo, el medio OGlobo advirtió que, según el artículo 17 del Código de Disciplina de la FIFA, la CBF es responsable de la seguridad: “Los clubes y federaciones locales son responsables del orden y la seguridad dentro y alrededor del estadio antes, durante y después de los partidos. [...] Se hacen responsables de incidencias de cualquier tipo”.
El comunicado completo de la CBF
LA CONFEDERACIÓN BRASILEÑA DE FÚTBOL brinda las siguientes aclaraciones respecto de los incidentes ocurridos en el partido Brasil x Argentina, disputado este martes 21/11/2023, en el Maracaná, válido por las Eliminatorias al Mundial de Fútbol 2023.
Es importante aclarar que la organización y planificación del partido fue realizada cuidadosa y estratégicamente por la CBF, en conjunto y en constante diálogo con todos los órganos públicos competentes, especialmente la Policía Militar del Estado de Río de Janeiro.
Toda la planificación del partido, especialmente el plan de acción y de seguridad, fue discutido con las autoridades públicas de Río de Janeiro en reuniones celebradas entre las partes.
Los planes de acción y seguridad fueron aprobados sin reservas ni recomendaciones por parte de las autoridades de seguridad pública presentes (Policía Militar de RJ, SEPOL, Ministerio Público, Cancha de Fanáticos, Guardia Municipal, CET-RIO, Subprefectura, Concesionaria del Maracaná, SEOP, etc.), incluyendo la Policía Militar de RJ, en la primera reunión realizada en la sede de la Federación de Fútbol del Estado de Río de Janeiro (FERJ), el día 16 de noviembre de 2023, a las 11:00 horas. Además de los planes de acción y de seguridad, los participantes en la reunión también abordaron toda la preparación del desarrollo del partido, con la participación de todas las partes directamente involucradas y responsables de la organización del partido y las autoridades públicas.
El lunes (20), el plan operativo del juego también fue aprobado sin reservas ni recomendaciones en la reunión celebrada en el Estadio Maracaná, con la presencia de la CBF, representantes de la CONMEBOL, la Policía Militar de RJ, las empresas responsables del operación Maracaná, y que operan más de 70 juegos en el estadio por año, y otras autoridades públicas.
La realización del partido con aficionados mixtos siempre ha sido conocimiento de la Policía Militar de RJ y otras autoridades públicas, como es la norma en las competiciones organizadas por la FIFA y la CONMEBOL, como ocurre en las Eliminatorias Mundialistas, en el propio Mundial, la Copa América. y otras competiciones. Otros partidos entre Brasil y Argentina, incluso con mayor atractivo, como la semifinal de la Copa América 2019, también se jugaron con afición mixta. Este no es un modelo inventado o impuesto por la CBF.
Es decir, todo el plan de acción y seguridad fue elaborado y escalado ya considerando la clasificación del juego como rojo y con la presencia de aficionados mixtos, tanto es así que 1050 guardias de seguridad privados y más de 700 policías militares de la Policía Militar de RJ trabajó para asegurar el partido.
Por lo tanto, la CBF reafirma que el plan de acción, seguridad y operación para el partido fue seguido estrictamente, aprobado por la Policía Militar de RJ y otras autoridades.
Finalmente, la única recomendación que recibió la CBF de cualquier autoridad pública durante todo el período previo al partido entre Brasil y Argentina, fue una recomendación del Ministerio Público, la Fiscalía 2ª para la Protección Colectiva del Orden Urbano de la Capital, por lo que “NO se realizarán partidos de fútbol en el año 2023 con el formato de disponer de la carga completa de entradas a través de una entrada electrónica presentada mediante la visualización del dispositivo celular, como ocurrió en la final de la Copa Libertadores el 4 de noviembre”. 2023″ y que “en el año 2023 exigirá que los aficionados que se acerquen a los torniquetes presenten evidencia física (boleto en papel y/o carné de aficionado) de que el aficionado tiene entrada para acercarse a los torniquetes del Estadio Mário Filho – Maracaná, con el fin de evitar la invasión de aficionados que no tienen entradas para ver el partido”.