(Desde Río de Janeiro) Las imágenes de acceso de los fanáticos de Boca Juniors al Estadio Maracaná generaron preocupación. Las puertas del recinto brasileño se abrieron una hora antes de lo pautado, alrededor de las 12 del mediodía, cuando se esperaba que se iniciara el proceso de ingreso a las 13. Pero debido a la gran cantidad de fanáticos del Xeneize que desembarcaron en las inmediaciones, decidieron que se adelante el procedimiento. Miles de seguidores esperaban en el sector, pero casi dos horas después de que entraron los primeros hinchas empezaron los problemas.
El arribo de La 12, la barra de Boca Juniors, derivó en un gran conflicto que involucró la intervención de la policía montada de Brasil, quien golpeó a algunos fanáticos y lanzó también gases lacrimógenos. Casi media hora después de que se haya desarrollado el ingreso de buena parte de la facción de la popular Xeneize, los problemas continuaban en el lugar.
En el arribo de la barra de Boca se pudieron visualizar imágenes de Fernando Di Zeo y Mauro Martín, dos de los líderes de ese sector de la hinchada. Según informó Infobae en las últimas horas, las caras visibles de la popular viajaron durante la madrugada de este sábado en un vuelo chárter que incluyó a unos 100 integrantes más de la barra. Hicieron contacto previamente con autoridades migratorias y de seguridad del vecino país, que los esperarían en Brasil cerca de las cinco de la mañana. Se esperaba que el grupo viajara escoltado desde el aeropuerto hasta los dos hoteles donde se alojarán. En uno cinco estrellas a apenas diez minutos del estadio estarán los 20 primerísimas líneas de la barra, el resto tendrá otro de menor va.
“No entiendo a la Policía, por qué frena ahí, ellos están causando el problema. Retienen a todos, que vayan liberando poco a poco”, dijo un hincha que viajó a Brasil para ver el partido en diálogo con el canal TN. “Estamos sufriendo los gases, nos tratan como delincuentes. Pudimos cruzar con los niños, pero quedó mi mujer allá. No sé que quieren controlar”, se quejó otro fanático que estaba con su hijo.
La situación entró en un terreno de tensa calma, pero alrededor de las 15 otra vez se registraron nuevos incidentes e inclusive pudo verse al cantante argentino, El Polaco, en la primera fila del ingreso de los fanáticos mientras la Policía tiraba los caballos encima del grupo.
Hay que recordar que durante la tarde del jueves se vivieron escenas de violencia que generaron máxima preocupación por las calles de Río de Janeiro cuando un grupo de fanáticos de Fluminense emboscó a hinchas de Boca que estaban en las playas. Luego, la Policía reprimió a los argentinos. Esto decantó en una reunión de emergencia entre la Conmebol, autoridades del fútbol argentino y sus pares brasileños, con el fin de tranquilizar la situación.
Los presidentes del Xeneize y del Fluminense, Jorge Amor Ameal y Mario Bittencourt, grabaron un video en conjunto para pedir que las parcialidades se tranquilicen. “Pedirle a la gente que por favor, que respete al contrincante, esto no es una guerra, esto es una cosa muy importante, un partido de fútbol. Nosotros queremos mucho al pueblo brasilero y queremos que nos quieran a nosotros también. Algunos violentos quieren cambiar esto que tiene una historia de vida. Queremos la felicidad”, dijo el máximo directivo de la entidad argentina.
Horas más tarde, las barras del Flu emitieron un comunicado llamando a la paz. “Se firmó un pacto para que cesen de inmediato los conflictos con los hinchas de Boca Juniors. Independientemente de la nacionalidad, la rivalidad no puede tolerar actos de cobardía, ya sea contra la historia de los indígenas y negros, o contra las familias”, dijeron por intermedio de las redes sociales.
El diario O’Globo informó en las últimas horas que, al mismo tiempo de que se esperaba el acceso de los fanáticos al estadio, el Ministerio Público y la Policía Civil de Río de Janeiro llevaron a cabo distintas acciones en la ciudad para prevenir actos de violencia. “Uno de los principales objetivos de la acción es un miembro de una afición organizada del Vasco, que publicó en las redes sociales amenazas a los aficionados del Fluminense”, indicó el periodista Athos Moura. “Hicimos trabajos representando la búsqueda e incautación de materiales relacionados con delitos y tuvimos órdenes judiciales emitidas en el domicilio de uno de los involucrados en las publicaciones que se viralizaron y Torcida Jovem do Vasco”, declaró el jefe de la Estación de Represión de Delitos Informáticos (DRCI), Luiz Lima.
Las fuerzas de seguridad emplearon acciones contra integrantes de las mayores hinchadas organizadas de Fluminense, Vasco da Gama y Flamengo. “Todos los aficionados tienen prohibido el acceso a los estadios y también se les ha prohibido participar en cualquier evento relacionado con la final de la Copa Libertadores. La Policía Militar actuará en los locales de fiesta para impedir la entrada de estos aficionados”, aseguraron.