El 28 de noviembre del 2000, Boca Juniors dio uno de los golpes de su historia: derrotó 2-1 al Real Madrid de Vicente Del Bosque y se adjudicó la Copa Intercontinental. Las grandes figuras del partido fueron Martín Palermo, autor de un doblete, y Juan Román Riquelme, que firmó una de las actuaciones más descollantes a nivel internacional en el mundo del fútbol. ¿Qué pasó con la camiseta que usó esa noche en Tokio el ídolo xeneize?
Desde hace más de dos décadas, descansa entre las pertenencias y el museo personal de Luis Figo, quien intercambió su casaca con la 10 del Madrid después del partido. Ahora, el portugués donará la reliquia al Museo Legends, una exhibición itinerante que actualmente se montó en Madrid y es patrocinada por el argentino Marcelo Ordás.
Hace algún tiempo, el propio Riquelme relató cómo fue que canjeó la número 10 con la estrella lusitana: “Mirá cómo le gusta el fútbol a mi viejo que terminó el partido y todos los jugadores estaban corriendo, saltando... Yo tuve que ir a decirle a Figo que me cambie la camiseta, porque mi viejo quería la de Figo. Él quería la camiseta de Figo”.
Cacho Riquelme, su mentor, le había hecho un pedido especial antes de que viajara a Japón. Y Román, obediente, cumplió: “La tele muestra cuando le estoy cambiando la camiseta a él. Antes del partido habíamos arreglado para cambiarla y él me dijo que sí, así que un fenómeno”. Lo curioso fue lo que ocurrió justo en el instante en que ambos quedaron en cueros: “En el momento en que me la va a cambiar, viene Bianchi a abrazarme, entonces lo abrazo a Bianchi y él (Figo) tuvo que esperar a que soltara al pelado. Él estaba ahí, un fenómeno”.
Crónicas de aquella jornada histórica cuentan que Figo tuvo la caballerosidad de estrechar la mano con su rival pese a que a lo largo de todo el match había sido increpado por sus compañeros. El portugués había sido fichado por el Madrid directamente desde el Barcelona, donde le hicieron la cruz y lo tildaron de “Pesetero” (por las pesetas, moneda que se usó en España hasta el 99). Los suplentes xeneizes, que habían tomado nota del asunto, empezaron a jugar su partido cargándolo al portugués con ese mote. “Le gritábamos con el Mellizo a Figo que era un pesetero. Él miraba al banco y se reía. Y sí, un poco cumplimos con el objetivo de sacarlo del partido”, contó hace un tiempo la Tota Medina. La memoria de Nico Burdisso señala a otro compañero: “Obviamente era el Chipi Barijho el que le gritaba y trataba de sacarlo un rato del partido”.
Así fue que varios futbolistas de Boca se llevaron camisetas de los madrileños (Palermo, la de Fernando Morientes; el Chipi Barijho, la de Íker Casillas, por ejemplo) y los del Real también se guardaron para su colección las de color azul y oro. Esa no fue la única perlita que Riquelme guarda en su placard, ya que nada menos que Zinedine Zidane le pidió cambiar la última remera que usó como profesional luego de un Real Madrid-Villarreal por la liga española.
LA SINTÉSIS DEL PARTIDO:
Real Madrid 1: Iker Casillas; Geremi Njitap, Fernando Hierro, Aitor Karanka, Roberto Carlos; Claude Makelele, Iván Helguera, Luis Figo; Guti, Steve McManaman; y Raú González. DT: Vicente Del Bosque
Boca Juniors 2: Óscar Córdoba; Hugo Ibarra, Jorge Bermúdez, Cristian Traverso, Aníbal Matellán; Sebastián Battaglia, Mauricio Serna, José Basualdo; Juan Román Riquelme; Marcelo Delgado y Martín Palermo. DT: Carlos Bianchi
Goles: 3′ PT y 6′ PT Martín Palermo; 12′ PT Roberto Carlos