Luego de tener que abandonar el campo de juego del estadio Centenario en camilla antes de la finalización del primer tiempo en Uruguay-Brasil, Neymar recibió la peor noticia: sufrió la rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco de la rodilla izquierda y deberá ser operado. La rehabilitación le demandará entre seis y ocho meses de inactividad.
En medio del dolor y la incertidumbre, el delantero del Al Hilal de Arabia Saudita, de 31 años, recibió numerosas muestras de apoyo y cariño. Una de las más emblemáticas fue la de su amigo y ex compañero Lionel Messi. La Pulga se tomó unos minutos en su regreso a Miami tras anotar dos goles con la selección argentina ante Perú para respaldar al ex San Pablo.
“Fuerza Neymar Junior”, escribió en una historia en su cuenta de Instagram, que ilustró con una imagen de ambos con la camiseta del Barcelona, club en el que coincidieron por primera vez y en el que ganaron una Champions League, entre otros títulos. Luego volvieron a congeniar en el PSG. Y la relación entre ambos trascendió la rivalidad entre Brasil y Argentina, al punto que luego de la final de la Copa América 2021, en la que la Albiceleste se impuso en la final disputada en el Maracaná, se los vio conversando con complicidad, demostrando que en el vínculo el resultado es algo aleatorio.
La lesión impedirá el encuentro de los dos astros el próximo 21 de noviembre, cuando la Verdeamarela reciba a los campeones del mundo en Río de Janeiro, por la sexta fecha de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al certamen que se desarrollará en Estados Unidos, México y Canadá en 2026.
Ney se lastimó en el final de la primera etapa del triunfo de Uruguay 2-0 ante la Canarinha: disputó una pelota con Nicolás de la Cruz y, tras perder en el cuerpo a cuerpo, pisó mal con la pierna izquierda y cayó al cesped cuando Manuel Ugarte buscaba terciar en la puja. Enseguida, el delantero del Al Hilal de Arabia Saudita exteriorizó su dolor y pidió asistencia médica. Sus compañeros solicitaron rápido el cambio (lo reemplazó Richarlison) y terminaron retirándolo en camilla.
Al momento de marcharse del estadio, lo hizo asistido por muletas. A pesar de la compleja situación, se detuvo a saludar y tomarse una foto con una fanática. Este miércoles, según informó la Confederación Brasileña de Fútbol, se sometió a “pruebas clínicas y de imagen” que confirmaron el diagnóstico que se preveía en la delegación del Scratch instantes después del incidente.
La lesión se da en medio de la adaptación del delantero a la Saudi Pro League, a la que se sumó a mediados de agosto. El club que lo contrató, Al Hilal, le abonó 100 millones de dólares al París Saint Germain por su ficha, y acordó un salario con el jugador de USD 300 millones, récord en la inflamada economía de la liga de dicho país (y la cifra podría alcanzar los USD 400 millones si el jugador cumple diversos objetivos). Al mismo tiempo, hace apenas diez días fue papá de Mavie, su segunda hija (su otro heredero, Davi Lucca, tiene 11 años).