La mesa estaba servida para que Francia acceda a las semifinales del Mundial de rugby: un Stade de France repleto de fanáticos galos cantando La Marsellesa, Inglaterra esperando en la siguiente fase tras eliminar a Fiji y el impresionante regreso de Antoine Dupont tras una fractura de pómulo eran algunos de los condimentos que se vivieron en la previa. Sin embargo, los anfitriones del máximo certamen se apuraron a descartar a una emblemática selección como los Springboks y estos se encargaron de dar un golpeLos Blues de Francia vieron rotura su sueño común roto con el frío pragmatismo y la intransigente defensa sudafrican de autoridad con una memorable victoria por 29-28.
La caída de Les Bleus resonó tanto en territorio francés como en todo el hemisferio norte. Ver que una vez más tres de los cuatro semifinalistas de la Copa del Mundo son países del sur del globo que compiten de manera anual en el Rugby Championship es una decepción para aquellos que predijeron un dominio de los europeos en la edición 2023.
El primer medio importante en reflejar la derrota en palabras fue L’Equipe: eligió una foto de Antoine Dupont tomándose la cabeza por la tristeza y tituló con la frase “Para llorar” como acompañante. El diario catalogó a la generación de jugadores como “uno de los equipos más bellos de Francia” pero que tuvo la mala fortuna de perder contra “una Sudáfrica menos talentosa pero con un oportunismo clínico”. A diferencia de los fanáticos, el portal no profundizó en algunas discusiones arbitrales que dominó las conversaciones y destacó a Cheslin Kolbe como la gran figura del encuentro.
Por el lado de Le Parisien, decidió describir la eliminación de una manera más dura. “Un fiasco francés”, tituló su tirada del lunes 16 de octubre. “El Stade de France se congeló, aparentando no entender. Un error, un tackle fallido, un globo perdido, un último cuarto de hora en apnea, y es un mundo que se está derrumbar”, describió sobre la jugada final que significó la victoria de los Springboks. Y cerró con una mirada de esperanza hacia el futuro: “Francia se va con la sensación de que perdió una cita única con su público. Su país. Su historia. Con la amareza de haber fracasado en su misión. Y tal desilusión debe ser recuperada”.
Por otro lado, la Voz del Norte seleccionó tres palabras para describir la tristeza: “Bokes, roto, devastado”. En el caso de Le Populaire, reflejó la tristeza con una frase. “Los Blues de Francia vieron su sueño común roto con el frío pragmatismo y la intransigente defensa sudafricana”, graficó el medio galo. Para agregar, el portal Sud Ouest destacó la verdadera batalla que presentó el conjunto azul contra la nación tres veces campeona del mundo: “El corazón a medias, pero la cabeza en alto”.
L’Independant prefirió realizar un análisis de los semifinalistas. “Aparte de Argentina, las últimas plazas están otra vez distribuidas entre Inglaterra, Nueva Zelanda y Sudáfrica. No es más que un terrible clasicismo cuando uno soñó con un nuevo orden mundial con una Francia-Irlanda en la final. Finalmente, el Mundial duró sólo un fin de semana”, concluyó sobre la eliminación.
LAS TAPAS DE LOS MEDIOS FRANCESES TRAS LA ELIMINACIÓN DEL MUNDIAL DE RUGBY