Nueva Zelanda venció a Irlanda por 28-24 y enfrentará a Los Pumas por las semifinales del Mundial de rugby el viernes 20 de octubre desde las 16 en el Stade de France. En este mismo estadio, el seleccionado oceánico lideró el partido desde el comienzo y mostró su entereza histórica para quedarse con un duelo muy luchado. En primer turno, la Argentina le había ganado 29-17 a Gales.
Los primeros segundos de los All Blacks estuvieron marcados por un nerviosismo impropio del tricampeón mundial. Los errores en la distribución de la pelota fueron olvidados rápidamente por un breve asedio en campo rival, pero la férrea defensa europea impedía llegar con claridad al in-goal. La vía del penal facilitó la inauguración del marcador con una buena pegada de Richie Mo’unga (3-0) y, a los 14′, Jordie Barrett amplió la ventaja de la misma manera (6-0).
La apertura del resultado provocó una respuesta inmediata en el número 1 del ranking de la World Rugby y estuvieron a un paso de un try sobre los postes, pero Tadhg Furlong se apresuró y fue anticipado por sus contrincantes hasta perder el dominio de la ovalada. Una equivocación imperdonable ante un equipo infalibre: segundos después, llegó el primer try del partido con una buena combinación de Rieko Ioane con Leicester Fainga’anuku, quien fijó el 11-0.
Luego de que Mo’unga marcó la conversión (13-0), los conducidos por Andy Farrell descontaron con un penal de Johnny Sexton (13-3). Cinco minutos después, a los 27′, Bundee Aki se filtró en la última línea neozelandesa para apoyar la pelota en el in-goal y Sexton completó la jugada de siete puntos (13-10). El ida y vuelta se destacó en un trámite cambiante, ya que Ardie Savea anotó el segundo try de Nueva Zelanda. Mo’unga erró la conversión para dejar las cosas 18-10.
La tarjeta amarilla a Aaron Smith lo sacó de la cancha por 10 minutos y, en la continuidad de la jugada, Irlanda aprovechó la superioridad numérica para achicar la diferencia. El saque del line, el apoyo desde el maul, el try anotado por Jamison Gibson-Park y la pegada de Sexton terminó la etapa inicial con un final abierto (18-17).
El regreso de las formaciones al terreno de juego estuvo marcado por la paridad. Irlanda buscó tener protagonismo en los primeros instantes hasta que Smith cumpla su sanción disciplinaria, pero los All Blacks, ya con alineación completa, mostraron su poderío a los 52′. Tras la realización de un line, Richie Mo’unga quebró el cerrojo defensivo, le cedió el try a Will Jordan (23-17) y Jordie Barrett estampó el 25-17.
A los 58′, Johnny Sexton sorprendió al fallar un penal desde una posición cercana al centro y parecía que los derrotados comenzaban a ceder frente a los candidatos a la corona. Sin embargo, un try penal (se brindan siete puntos al conjunto atacante si se impide una anotación por el “juego sucio” de los oponentes) a los 64′ puso de vuelta en partido a los del Viejo Continente. Quedó abajo por uno (25-24) y Nueva Zelanda se quedó con 14 jugadores por la amarilla a Codie Taylor. Sobre llovido, mojado: Jordie Barrett marró un penal y no pudo ampliar la diferencia para los oceánicos. Más tarde, se tomó revancha y señaló el 28-24.
En la última jugada del partido, Irlanda tuvo una posesión con más de 35 pases, pero Nueva Zelanda se hizo fuerte en los metros finales para sentenciar el triunfo. De esta forma, sigue su ascenso en el Mundial de rugby y dejó atrás el fantasma de una eliminación prematura, como sucedió en la edición 2007, en Francia, contra el local. Justamente, los Galos fueron su única derrota en la actual Copa del Mundo. Desde allí, acumuló goleadas ante Namibia, Italia y Uruguay para recuperar la confianza.
Por otro lado, Irlanda se despidió tras una primera fase excepcional, con puntaje ideal y perdió una oportunidad histórica de pelear por el título. Fue su tercera caída en Mundiales contra este rival. Los anteriores cruces fueron en los cuartos de final en Japón 2019 (46-14) y en la edición de Sudáfrica 1995 (43-19).
ALINEACIONES:
IRLANDA: 1. Andrew Porter, 2. Dan Sheehan, 3. Tadhg Furlong, 4. Tadhg Beirne, 5. Iain Henderson, 6. Peter O’Mahony, 7. Josh van der Flier, 8. Caelan Doris, 9. Jamison Gibson-Park, 10. Johnny Sexton, 11. James Lowe, 12. Bundee Aki, 13. Garry Ringrose, 14. Mack Hansen, 15. Hugo Keenan.
Suplentes: 16. Ronan Kelleher, 17. David Kilcoyne, 18. Finlay Bealham, 19. Joe McCarthy, 20. Jack Conan, 21. Conor Murray, 22. Jack Crowley, 23. Jimmy O’Brien.
NUEVA ZELANDA: 1. Ethan de Groot, 2. Codie Taylor, 3. Tyrel Lomax, 4. Brodie Retallick, 5. Scott Barret, 6. Shannon Frizell, 7. Sam Cane (C), 8. Ardie Savea, 9. Aaron Smith, 10. Richie Mo’unga, 11. Leicester Fainga’anuku, 12. Jordie Barrett, 13. Rieko Ioane, 14. Will Jordan, 15. Beauden Barrett
Suplentes: 16. Dane Coles, 17. Tamaiti Williams, 18. Fletcher Newell, 19. Samuel Whitelock, 20. Dalton Papali’i, 21. Finlay Christie, 22. Damian McKenzie, 23. Anton Lienert-Brown
Estadio: Stade de France (París, Francia)
Árbitro: Wayne Barnes (UK)
Asistente Árbitro 1: Matthew Carley (UK)
Asistente Árbitro 2: Christophe Ridley (FRA)
TMO: Tom Foley (UK)