El ex patrón de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, de 92 años, se declaró culpable de fraude fiscal este jueves en un tribunal de Londres. El proceso en su contra se inició debido a la presunta omisión de declarar al fisco la suma de 400 millones de libras, equivalente a 490 millones de dólares, en activos ubicados en Singapur durante el periodo comprendido entre 2013 y 2016. Además, mintió a la Hacienda británica cuando esta le cuestionó sobre el tema en una reunión en 2015.
Ecclestone, que fue el jefe de la Fórmula One, organización que controlaba la Fórmula 1, hasta 2017, unos meses después de que Liberty Media se hiciera con el manejo de este deporte, acordó pagar más de 652 millones de libras (800 millones de dólares), añadieron los fiscales el jueves, después de que se declarara culpable de fraude fiscal.
Inicialmente, en agosto de 2022, Ecclestone se había declarado no culpable de estos delitos, lo que anticipaba un juicio programado para comenzar el 16 de noviembre. Sin embargo, en una audiencia celebrada recientemente, el magnate británico finalmente admitió su responsabilidad en el fraude fiscal, evitando así el juicio, pero quedando pendiente la imposición de la condena, cuya fecha se anunciará más adelante.
El multimillonario empresario se acercó al Tribunal de la Corona de Southwark vestido con un traje gris oscuro y acompañado de su esposa Fabiana Flosi. Una vez adentro, volvió a escuchar los cargos por los que se lo imputaba y sólo se declaró culpable del fraude correspondiente al 7 de julio del 2015. Cabe destacar que en primera instancia negó los cargos y aseguró por entonces que solo estableció un fideicomiso en favor de sus tres hijas, Deborah, Tamara y Petra.
Según el fiscal, las respuestas que dio el ex presidente del Gran Circo hace siete años fueron “erróneas” y podían “inducir a error”, al mismo tiempo que esclarece que el acusado no era consciente de su posición y no podía dar una respuesta clara.
“El señor Ecclestone no sabía con exactitud cómo la propiedad de estas cuentas estaba estructurada. Por lo tanto, no sabía si tenía que pagar impuestos, intereses o multas en relación a las transferencias entre cuentas. El señor Ecclestone reconoce que fue un error contestar a las preguntas porque podía provocar que el HMRC (la Hacienda británica) dejara de investigar sus asuntos. Ahora acepta que hubiera que pagar impuestos por ello”, aseguró el fiscal.
Efímero piloto de carreras a finales de la década de 1950 y, después jefe del equipo Brabham, el empresario británico, cuya fortuna fue estimada por la revista Forbes en más de 2.500 millones de libras (2.952 millones de dólares), está considerado como el artífice de la transformación de la F1, al convertirla en una actividad lucrativa. En concreto, a finales de los años 70 fue uno de los pioneros en la comercialización de los derechos de retransmisión televisiva de eventos deportivos.