El Estadio Luigi Ferraris fue testigo de un partido que tuvo un final no apto para cardíacos en el duelo que mantuvieron el local Genoa y Milan por la 8ª fecha de la Serie A de Italia. Un gol a tres minutos del cierre del tiempo reglamentario que rompió el empate en cero, los dos arqueros expulsados en la adición y una segunda etapa que se extendió 14 minutos más allá de los 45 que establece el reglamento. ¿El gran protagonista? Olivier Giroud.
Tras el gol del norteamericano Christian Pulisic a los 87 minutos, el árbitro Marco Piccinini decidió expulsar al arquero francés del Milan Mike Maignan a instancias del VAR tras un violento foul en la puerta del área sobre Caleb Ekuban.
El reloj llevaba 107 minutos, cumpliéndose los 7 que había adicionado el juez previamente. El entrenador Stefano Pioli había agotado las cinco variantes disponibles para entonces y quien debió calzarse el buzo fue el delantero francés Giroud, que comenzó el partido como suplente pero en el complemento reemplazó a su compatriota Yacine Adli.
El atacante de 37 años se puso debajo de los tres palos con el reloj entrando al minuto 101, es decir, 11 más del tiempo establecido por el reglamento. El islandés Albert Gudmundsson se hizo cargo de ese peligroso tiro libre, la pelota pegó en la barrera y luego en el travesaño. El rebote, que tenía destino de arco, terminó impactando en un defensor del Rossonero para generar un córner.
Esa nueva pelota parada tuvo la aparición en el área de la visita del arquero español del Genoa Josep Martínez. No pudo alcanzar la pelota, pero sí fue protagonista estelar de la jugada: pegó un patadón a Yunus Musah, vio la segunda amarilla y también dejó la cancha. En este caso, el técnico Alberto Gilardino sí tenía todavía variantes disponibles y los tres palos del Genoa fueron ocupados por el italiano Nicola Leali, que ingresó por el defensor Koni de Winter.
Pero todavía quedaba un capítulo más del final electrizante. Giroud ejecutó la falta desde su área, pero rápidamente el local recuperó y armó una jugada espectacular que terminó con una habilitación de taco de Ekuban para el rumano George Puscas, pero el delantero devenido en arquero tuvo una reacción magistral para tapar el remate del contrincante y luego controlar cuando llegaba otro jugador para empujarla.
Fue, al final y una intervención crucial porque segundos más tarde, con el reloj ya en 104 minutos, el juez decretó el cierre del encuentro.
Milan obtuvo tres puntos que lo consolidan como líder de la Serie A con 21 puntos producto de siete triunfos y una derrota en los ocho duelos que disputó hasta acá. Detrás se ubica el Inter de Lautaro Martínez con 19, que había empatado en primer turno ante Bologna.