¿Lujo o provocación? La jugada de Valentín Barco que enfureció a todo Palmeiras

El Colo ensayó la pisadita que hace algunos días había hecho el venezolano Soteldo en Santos

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Fiel a su costumbre, Valentín Barco se despojó de todo tipo de presiones y nervios para afrontar la revancha de las semifinales de la Copa Libertadores frente a Palmeiras en San Pablo. El número 19 de Boca fue uno de los puntos altos de la visita, que en el primer tiempo sacó ventaja gracias a una corrida letal de Miguel Merentiel que derivó en el buscapié y pase a la red de Edinson Cavani para quebrar el cero en el estadio Allianz Parque. Al rato, el Colo hizo de las suyas...

Antes de que culminara la primera mitad, Barco recibió recostado sobre la banda izquierda, ubicado como volante/extremo, y pisó el esférico. No con uno, sino con ambos pies, ante la atenta mirada del lateral derecho del Verdao, Marcos Rocha. Enseguida hizo circular el balón y evitó que fueran a buscarlo. La jugada emuló lo que había hecho hace algunos días el venezolano Jefferson Soteldo, que sacó de quicio a los rivales de Vasco da Gama con la camiseta del Santos, por el Brasileirao.

El equipo de Jorge Almirón mantuvo la posesión de la pelota y cambió de banda, donde el que la ligó fue Cristian Medina, quien recibió una infracción. Será difícil saber si Cavani, que se acercó hasta la posición de Barco, le mencionó algo sobre su pisada. Lo cierto es que el pelirrojo adquirió mucha confianza al igual que todo Boca y de ese tiro libre sacó un zurdazo fuertísimo que fue desactivado por el arquero Weverton.

Hace algunas semanas, Barco había declarado sobre su estilo de juego que algunas veces es repudiado por algunos adversarios, como ocurrió en la serie de octavos de final de la Libertadores ante Nacional de Uruguay: “Me sale de adentro hacerlo, no es para cargar a nadie. ¿Que el uruguayo Polenta se calentó conmigo? Sí, pero no pasa nada. Siempre jugué así, el que me conoce de chico sabe que no lo hago para cargar a nadie. Lo hago porque juego así”.

A pesar de tener solamente 19 años, el talentoso zurdo que es seguido por varios clubes grandes de Europa, juega como si fuera un veterano. Sobre la tranquilidad con la que ejecutó su penal en la tanda ante los uruguayos, expresó: “Trato de distraerme, no estar pensando en el penal que tenía que patear. No soy de ponerme nervioso tampoco, trato de estar concentrado en lo mío y despejarme. Cuanto más pensás, es peor en ese momento. Fui libre y sabía lo que iba a hacer”.

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