David Beckham y su mujer Victoria Adams hoy se muestran con mucha felicidad en los partidos de local del Inter Miami de Lionel Messi, la franquicia del fútbol estadounidense de la que el ex futbolista inglés es uno de sus máximos accionistas. Sin embargo, hace dos décadas la ex Spice Girls sufrió por los rumores de infidelidad de su marido que por poco no terminan con la pareja.
La ex cantante nunca se había referido al tema, pero esta vez se abrió y reveló lo mal que la pasó. Sus testimonios fueron recogidos de la serie “Beckham”, que consta de cuatro capítulos y que se estrenará este miércoles en Netflix, cuyo foco será la vida futbolística de David y la mediática y convulsionada relación con su esposa.
Este suceso se originó en la época en que Beckham formó parte de Los Galácticos del Real Madrid. Sobre los rumores de infidelidad del ex volante, la empresaria confesó: “Fue el período más difícil porque sentía que el mundo estaba en nuestra contra”. Además, describió esos momentos como “una pesadilla” y añadió: “Fui lo más infeliz que he sido en toda mi vida”.
Por su imagen y el boom que generaba, Beckham se convirtió rápidamente en un imán para las principales marcas del planeta. El cocktail explosivo a nivel mediático se completó con su relación con Victoria, quien también es una de las personalidades más reconocidas en el ambiente del espectáculo y de la moda. “No es algo que suceda normalmente, ya sabes, un futbolista y una estrella del pop juntos y las presiones de eso, pero también está el lado de ella de gira mundial, yo tenía muchas ganas de verla. Obviamente, yo no podía viajar. Entonces, solíamos escabullirnos”, afirmó.
En la serie de streaming también se destaca un episodio clave en la carrera del futbolista como la expulsión en el duelo ante la Argentina por los octavos de final del Mundial de Francia en 1998. Fue el 30 de junio de 1998 en el Stade Geoffroy-Guichard, en St. Étienne. La jugada se produjo a los 47 minutos, cuando Beckham le tiró una patada desde el piso a Diego Simeone, el árbitro lo vio y le sacó la roja.
Los ingleses sintieron el jugador de menos, el encuentro terminó igualado y en la definición por penales se clasificó el equipo que era conducido por Daniel Alberto Passarella. “Nunca hablé de eso, no puedo hacerlo”, fueron los primeros testimonios que se mostraron en el tráiler sobre aquel hecho.
“No comía ni dormía, hizo mella en mí, no me conocía a mí mismo”, admitió David. “Yo era un desastre. No sabía qué hacer”, agregó. “Ojalá hubiera una pastilla que pudiera tomar y que pudiera borrar ciertos recuerdos. Cometí un error estúpido. Cambió mi vida”, reveló el ex mediocampista inglés antes de romper en llanto, según replicó el periódico británico The Sun en un adelanto exclusivo al que tuvo acceso.
Pese a ello, Beckham esgrimió: “No me rindo con facilidad”. Ganó todo con el Manchester United en el inolvidable 1999 (Premier League, Champions League, FA Cup y Copa Intercontinental) y luego fue uno de los responsables de llevar a su selección al Mundial de Corea-Japón 2002, en el que se volvió a cruzar con la Argentina. Se tomó revancha y de penal marcó el gol del triunfo 1-0 en el estadio cerrado de Saporo. Más tarde fueron eliminados en cuartos de final por Brasil (2-1), que terminó siendo el campeón.
Su campaña lo llevó al Real Madrid de los Galácticos y en 2007 llegó a la Major League Soccer (MLS), donde obligó a cambiar las reglas y se dio lugar a las excepciones para contratar de figuras de primer nivel que estuviesen fuera del límite de presupuesto. Esto abrió el camino a otras estrellas y por obra de Beckham -en gran medida- este año se concretó el arribo el mejor futbolista del planeta, Lionel Messi.