Todos los protagonistas que engloban el mundo de la Fórmula 1 están viviendo momentos de tensión después de que se conociera la aprobación de la FIA al pedido de Andretti para formar parte de la parrilla y ser la escudería número 11 en el futuro inmediato (2024-25).
Finalmente, después de más de dos años de reuniones y análisis, la entidad que rige al deporte automotor afirmó a través de un comunicado que el equipo estadounidense fue el único que logró pasar a la tercera y última etapa de selección al entender que cumplió con todos los criterios establecidos. “Andretti Formula Racing LLC era la única entidad que cumplía los criterios de selección establecidos en todos los aspectos materiales. Felicito a Michael Andretti y a su equipo por su exhaustiva presentación”, afirmó el presidente de la FIA Ben Sulayem.
Sin embargo, todavía queda un filtro que deberá pasar Michael Andretti. Si bien la Federación Internacional de Automovilismo dio el visto bueno, ahora deberá llegar a un acuerdo comercial con la Formula One Management (FOM), quien posee y explota los derechos comerciales del campeonato, así también como la marca y los logotipos oficiales.
Es allí donde radica el principal obstáculo, ya que los miembros de la FOM se muestran reacios a que ingrese un nuevo competidor a la parrilla. Cabe destacar que el organismo está compuesto por 30 personas que toman decisiones y de las cuales un integrante de cada una de las 10 escuderías tiene un voto. Según Motorsport, para aceptar una propuesta debería ser aprobada por al menos 25 miembros.
En relación a ello, uno de los puntos que debe cumplir la escudería solicitante es el de contar con las capacidades financieras necesarias para formar parte del Gran Circo, un ítem que hoy está en el foco del problema, no por Andretti, sino por el resto de los competidores.
Según informó el periódico Sport, el equipo estadounidense tiene en su cuenta los 200 millones de euros que deberá desembolsar para entrar en la competición. Cifra que se estableció cuando se firmó el último Pacto de la Concordia en 2020, el cual también detallaba que ese monto se repartiría a partes iguales entre las 10 escuderías y que no podía haber más de 13 equipos en la parrilla.
Sin embargo para este 2023, tres años después de estampar su firma, los directivos de la mayoría de los equipos participantes habrían considerado que ese monto quedó obsoleto: “Si pusiesen 700 millones entonces sí que sería una cuestión razonable que haría sentarnos a todos”, habrían reconocido algunos jefes de equipo, según replicó Sport.
Pese a que Liberty Media y la FIA entienden que las escuderías no tienen derecho a bloquear el acuerdo, basándose en lo firmado en 2020, la última que tendrá la decisión de aceptar un nuevo equipo será la FOM, compuesta por integrantes de las 10 equipaciones.
El fabricante estadounidense deberá entonces superar este nuevo obstáculo y para hacerlo tendrá que sentarse a negociar, aunque ya se habría mostrado totalmente en desacuerdo con abonar esas cantidades sugeridas.
“Hemos pasado por épocas realmente difíciles, en que la Fórmula 1 no ha sido el éxito que es hoy, y por lo tanto creo que cualquiera que ingrese en este deporte debería aportar algo nuevo al espectáculo”, consideró Toto Wolff, director de Mercedes, en mayo haciendo referencia a que cualquier participante nuevo tendrá que contar con fondos para invertir y ayudar al crecimiento del deporte.
La posible llegada de Andretti Formula Racing sería un gran desembarco en el torneo ya que arribará de la mano de un gigante del motor como General Motors, además de hacerse un nombre dentro del automovilismo mundial con participaciones en la IndyCar Series, Indy Lights, Fórmula E y el Mundial de Resistencia.
Cabe señalar que sólo cuatro equipos lograron pasar la segunda fase del análisis de la FIA y de los cuales solamente accedió Andretti a la tercera y última. El resto eran Fórmula Equal (Arabia Saudita), Hitech Grand Prix (Gran Bretaña) y LKY SUNZ (Asia)