Mientras Gerardo Martino y todo Inter Miami espera volver a verlo dentro del campo de juego lo más rápido posible, Lionel Messi aprovechó para realizar una acción comercial en el DRV PNK Stadium de Fort Lauderdale, donde participó de un evento junto a decenas de niños en el cual se vistió de chef para presentar un menú infantil de una reconocida cadena de restaurantes.
Vestido con un delantal blanco, como aquellos que lucen los más destacados cocineros del mundo, Leo se presentó ante los chicos, que estaban con el uniforme de Inter (tanto rosa como negro) y sostenían globos de colores. “¿Quién conoce a este señor?”, preguntó la presentadora. Tras el grito desaforado de los pequeños, Messi tomó la palabra. “Buenas tardes a todos, es un placer estar acá con todos ustedes y compartir este rato. Ojalá podamos compartir este rato especial para mí y para todos y pasemos un lindo día. Gracias por estar acá”, dijo el astro rosarino.
El evento organizado por el Hard Rock Café consistió en el lanzamiento de un menú saludable para los niños y Messi interpretó el papel de un chef que debía levantar dos cilindros para descubrir las hamburguesas que serían parte de la nueva carta del restaurante. Los presentes deliraron con la presencia del futbolista y no paraban de gritar. Luego, llegó el momento de los ejercicios y Lionel salió al campo de juego con ropa de entrenamiento para mostrar sus habilidades y saludar a sus fanáticos, que aguardaban impacientes en la fila para estrechar sus manos con la del 10.
“La gente de Hard Rock celebró una conferencia de prensa con Lionel Messi después de la revelación del Menú Infantil, pero sólo a los niños se les permitió hacer preguntas, no a los medios. Ninguno de los niños preguntó sobre su lesión”, destacó la periodista del Miami Herald, Michelle Kaufman. En la ronda de consultas al campeón del mundo, un chico llamado Camilo pidió la palabra y le consultó: “¿Cómo haces con la presión y cómo haces para mantenerte calmado durante las finales, como en la Champions? Pero dinos tu secreto”.
“La verdad es que no sé si hay un secreto. Me mantuve tranquilo, siempre confiado en mí”, fue la respuesta del futbolista de 36 años que ganó 44 títulos a lo largo de su carrera, que se repartió entre Barcelona, París Saint Germain, Inter Miami y la selección argentina. Sin dar pistas sobre el estado de su lesión muscular en el isquiotibial de la pierna derecha que le hizo perder tres partidos (dos de la MLS y la final de la US Open Cup), en el club de los hermanos Mas y David Beckham aguardan su aparición en el miércoles 4 de octubre ante Chicago Fire por la fecha 36 del torneo, o en su defecto, el sábado ante Cincinatti, también por la Major League Soccer.