El partido entre Argentina y los Países Bajos en el Mundial de Qatar será recordado como la batalla de Lusail. El encuentro por los cuartos de final se definió en los penales después de un frenético 2-2 que se estiró al tiempo suplementario gracias a la aparición del gigante Wout Weghorst en el final del tiempo regular. Dibu Martínez fue el héroe en la definición, pero hubo otro protagonista que dejó el mano a mano por el pase a semifinales.
El árbitro español Mateu Lahoz sacó 17 tarjetas amarillas -siete para los neerlandeses y nueve para los argentinos a la que se sumó la amonestación para Walter Samuel- y en el cierre del suplementario vio la roja Dumfries. Más allá de ese récord para un encuentro en una Copa del Mundo, el réferi europeo fue apuntado por la conducción del partido y recibió duras críticas de Messi tras la victoria del equipo de Scaloni.
“La FIFA no puede poner un árbitro así en esta instancia”, dijo el astro rosarino el pasado 9 de diciembre tras avanzar de ronda. A casi 10 meses de aquel cruce, Mateo Lahoz recordó cómo vivió esa noche en Doha y se refirió a la actitud del capitán de la selección argentina. “Fue una lástima. Hemos compartido más de 50 partidos. Después de la celebración del Topo Gigio, los holandeses se exaltaron, fue una provocación”, aclaró el juez de España.
Acto seguido, el juez español, que se retiró en junio de este año tras 15 temporadas en el fútbol de su país, contó que el histórico número 10 de la Albiceleste se comunicó con él luego de las declaraciones contra su persona. “Leo Messi me llamó después del partido de Holanda en el Mundial y me pidió disculpas por las duras palabras que me dirigió durante el partido. Era un Messi diferente en ese partido”, reveló en Tiempo de Juego, programa de la cadena COPE.
Hay que recordar que el encuentro fue atrapante. Argentina estaba al frente 2-0 gracias a los goles de Nahuel Molina -tras una espectacular asistencia de Messi- y el tanto de penal del capitán de la Selección que derivó en un festejo contra el bando de los neerlandeses. Weghorst puso el descuento y, en una de las últimas jugadas del tiempo regular, puso el empate tras una jugada preparada en un tiro libre.
“Estoy con mucha bronca porque no era para que termine así el partido. No podés hablar del árbitro, no podes ser sincero porque después te sancionan. Teníamos miedo antes del partido porque sabíamos quién era. Más allá de eso (por la tarea de Lahoz) tuvimos la suerte de los penales y merecíamos pasar. El árbitro nos mandó a la prórroga, no solo por los minutos que dio, sino por las chiquitas, las boluditas. Creo que no era foul el último que cobró (antes del empate). Inclinó la cancha. Nos querían tumbar”, dijo un enojado Messi que marcó su posición sobre la actuación de Mateu Lahoz.
Fue después de eso cuando, en diálogo con el periodista de TyC Sports Gastón Edul, se cruzó con Weghorst que generó el famoso “¿qué mirás bobo? andá p’allá bobo”. Otro de los que fue crítico con las decisiones del réferi fue Dibu Martínez. “Me llegan dos veces y convierten. El árbitro quería que lo empaten. Es el peor árbitro de la Copa lejos. Les dieron 120 minutos”, expresó el arquero campeón del mundo. Por ser amonestados, tanto Marcos Acuña como Gonzalo Montiel se quedaron fuera del duelo de semifinales ante Croacia.