Max Verstappen volvió a imponerse en la carrera del Gran Premio de Japón, en la que dominó con claridad y en la que los dos McLaren, del británico Lando Norris y el australiano Oscar Piastri, le acompañaron en el podio, en segunda y tercera posición.
No hubo duda sobre el ganador de la carrera desde el principio del Gran Premio. Desde un viernes en el que el neerlandés comenzó liderando los Libres 1, queriendo demostrar que no hay nadie que pueda con él esta temporada y que los problemas en Singapur hace una semana fueron pasajeros.
“Que se vayan al carajo”, dijo en referencia a los críticos que aseguraban que el bajón de rendimiento de Red Bull en Singapur se debía a la nueva normativa de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) sobre la medición de la flexibilidad de los alerones delanteros. Unas dudas que se encargó rápido de echar por tierra con una victoria que permitió al equipo austríaco certificar su segundo título de constructores de forma consecutiva, el sexto de su historia.
Incontestable, como la pole del sábado por más de medio segundo, la victoria de un Verstappen que le sacó al británico Lando Norris (McLaren) dos segundos en dos vueltas, tras la resalida por el coche de seguridad en la vuelta 5, y a partir de ahí vivió con calma las otras 48 vueltas de carrera.
Verstappen recuperó su trono, con 19 segundos de ventaja sobre el segundo clasificado y acaricia su tercer campeonato del mundo de pilotos que podría certificar dentro de quince días en el Gran Premio de Qatar, ya que quedan 180 puntos disponibles y la ventaja del neerlandés sobre su inmediato perseguidor (Checo Pérez) es de 177. Esto quiere decir que Max deberá sacar tres puntos más en alguna de las siguientes seis carreras para obtener su tercer título consecutivo.
Para que eso suceda directamente en la sprint, deberían darse algunas combinaciones. Si Checo gana la sprint, al neerlandés solo le bastaría con terminar en el sexto puesto para sumar los puntos necesarios.
En el caso del que el mexicano termine segundo, A Mad Max le alcanzará con acabar al menos séptimo y si el latinoamericano finaliza tercero, Verstappen debe terminar al menos octavo. En el caso de que Pérez acabe cuarto, Verstappen será campeón antes de presentarse a la carrera del domingo.
Si no se llegara a dar ninguno de esos resultados en la previa, Sergio Checo Pérez deberá imponerse en Circuito Internacional de Lusail para estirar la definición a la siguiente carrera.
En cuanto a lo sucedido en Japón, Oscar Piastri salió mejor que Max, pero este le cerró por dentro y lo aprovechó Norris, que salía tercero, para intentar un adelantamiento por fuera, en curva rápida, que, en condiciones normales, nunca sale bien frente al neerlandés. Y este domingo no fue diferente.
Por detrás, el chino Guanyu Zhou (Alfa Romeo) chocó al tailandés Alexander Albon (Williams) y provocó toques también del francés Esteban Ocon (Alpine) y el finés Valtteri Bottas (Alfa Romeo). Caos con los pilotos jugándosela en los primeros metros en un circuito de Suzuka en el que es difícil adelantar y que provocó la salida del coche de seguridad por los trozos de fibra de carbono esparcidos en la pista.
Sergio Pérez que cerró un fin de semana para olvidar dentro de una temporada en la que, tras dos victorias en las cuatro primeras carreras, la irregularidad se ha apoderado de su 2023. El piloto mexicano se retiró en la vuelta 15 de 53 del Gran Premio de Japón al sufrir daños en su monoplaza después de chocar con el danés Kevin Magnussen (Haas) en un intento de adelantamiento.