El equipo de rugby de Nueva Zelanda, conocido mundialmente como los All Blacks, rindió un emotivo homenaje en el cementerio de Caterpillar Valley, cerca de Longueval, Francia. En este lugar se erige el Monumento Nacional de Nueva Zelanda, en conmemoración a los 1.205 soldados neozelandeses que perdieron la vida durante la Batalla del Somme en 1916, una de las confrontaciones más mortíferas de la Primera Guerra Mundial.
En este contexto de recuerdo y respeto, el capitán y ala de los All Blacks, Sam Cane, depositó una corona de flores en el monumento dedicado a los soldados neozelandeses desaparecidos. Además, el equipo rindió homenaje a los caídos con una haka, una danza maorí tradicional que simboliza desafío y respeto. Por su parte, el experimentado segunda línea Sam Whitelock entregó una camiseta de los All Blacks en memoria de Robert Stanley Black, el All Black número 211, quien también perdió la vida en la Batalla del Somme.
“Los All Blacks hicieron una visita especial al cementerio de Caterpillar Valley, cerca de Longueval, en el norte de Francia. El capitán Sam Cane depositó una ofrenda floral en el monumento a los soldados neozelandeses desaparecidos y rindió homenaje a los caídos”, escribió la cuenta oficial de Instagram del conjunto neozelandes junto a un video del momento del haka. Este tributo demuestra no solo el compromiso del equipo con su historia y su nación, sino también la importancia de recordar y honrar a aquellos que dieron su vida en conflictos pasados.
La Batalla del Somme es recordada por ser una de las más sangrientas de la historia, con el ejército británico sufriendo 57.000 bajas solo en el primer día del ataque, el 1 de julio de 1916. Esta campaña, que se extendió durante cinco meses, culminó a mediados de noviembre sin lograr un avance significativo en el conflicto.
Este acto de los All Blacks se dio en la previa a su debut en el Mundial de Francia 2023 justamente ante los locales el próximo viernes 8 de septiembre en el Stade de France de París. Este duelo será el encuentro inaugural de la competencia. Ambos elencos comparten el Grupo A junto a Italia, Uruguay y Namibia. Vale destacar que los dos primeros de cada zona avanzarán a los cuartos de final.
Pese a que los All Blacks la semana pasada sufrieron la peor derrota de su historia al caer por 35 a 7 contra Sudáfrica siguen siendo uno de los máximos candidatos a quedarse con la corona en territorio galo producto de su talentoso plantel e historia dentro de este deporte. Los neozelandeses son los máximos ganadores, junto a los Springboks, de esta competencia con tres títulos (Nueza Zelanda 1987, Nueza Zelanda 2011 e Inglaterra 2015). Además levantaron en 20 ocasiones The Rugby Championship.