“Es un estado de felicidad total, estamos entre los cuatro mejores de América”. En sus primeras palabras como semifinalista de la Copa Libertadores, luego del triunfo por penales de Boca Juniors ante Racing (tras sendos 0-0), Jorge Almirón primero exteriorizó su alegría.
“Creo que en el partido de ida sorprendimos al rival, jugamos mano a mano casi en toda la cancha y el equipo fue agresivo, tuvimos situaciones que no pudimos concretar. Hoy en el primer tiempo nos costó bastante recuperar la pelota y estuvimos apresurados para jugar. En el segundo tiempo volvimos un poco a las bases. Tenemos variantes”, analizó una serie cerrada y con escasas situaciones ante los arcos, en la que se repartieron el dominio un encuentro por bando.
El Xeneize tendrá un duro escollo en semifinales: Palmeiras, campeón de las ediciones 2020 y 2021, que viene de desfilar en su llave ante Deportivo Pereira (4-0 en Colombia y 0-0 en San Pablo). El encuentro de ida será el 26 ó 27 de septiembre en La Bombonera. La revancha, el 3 ó 4 de octubre en el Allianz Parque. ¿En el medio? La fecha de clásicos en la Copa de la Liga: el 1/10 se medirá contra River por la jornada 7 en La Ribera. Es por eso que el DT ya empezó a jugar sus fichas para ver si se puede mover la fecha para no distraerse del objetivo internacional.
“¿River? Veremos. Si se puede acomodar el partido sería lo ideal para la gente de Boca. Jugamos una instancia muy importante contra Palmeiras. Estaría bueno que jugáramos en igualdad de condiciones, ni uno ni otro debe tener ventajas. Hoy nosotros estamos en la Copa Libertadores y ellos pueden esperar para jugar este partido”, subrayó.
Otras frases salientes de Jorge Almirón:
“Forzamos un poco que estuvieran en el banco (por Valentín Barco) y en el medio estaban muy cansados. Se gastaron los cambios de otra manera. Lo bueno es que pudimos pasar y no corrimos riesgo de lesión. Tenemos tiempo para que se recuperen todos”.
“Queríamos ser vertiginosos y le dábamos la posibilidad al rival para que tuviera el campo abierto. No tuvieron tantas chances, pero cuando la perdíamos tenían un recorrido muy largo. El segundo tiempo se ajustó”.
“El partido de local dominamos en el juego, tuvimos más llegadas y provocamos que un rival que intenta jugar bien al fútbol no diera cuatro o cinco pases. No pudimos ganar en casa y hoy sí fue más parejo. En el balance general fuimos superiores. Y depués hay que estar para atajar penales y Chiquito los ataja”.
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