En la tercera edición consecutiva de la Copa Mundial Femenina de la FIFA que la selección de Inglaterra ha disputado las semifinales, finalmente pudo clasificar a la ansiada definición por el título. Tras las eliminaciones ante Japón (2015) y Estados Unidos (2019), llegó la sólida victoria por 3-1 ante Australia para firmar el pasaje a la definición ante España de este domingo.
La última vez que Inglaterra y Australia había sido en un amistoso para medir fuerzas que se jugó en abril, con victoria una para las Matildas que cortó una racha de 30 partidos sin perder para las campeonas de Europa. Pero este miércoles en el estadio de Sidney, la historia fue diferente.
Sam Kerr, goleadora y emblema de la selección australiana, fue titular por primera vez en el torneo y había una gran expectativa por verla desde el inicio. No obstante, en el arranque del cotejo, las coanfitrionas no lograban juntar pases y el balón era propiedad de las inglesas, que generaban un poco más de peligro pero sin tanta profundidad.
El primer tiempo, paulatinamente, se tornó áspero, trabado y friccionado. Hasta que las campeonas de Europa, dirigidas por la neerlandesa Sarina Wiegman, pudieron abrir el marcador: Ella Toone firmó el 1-0 a los 36 minutos con un fabuloso tiro de derecha que se clavó en el ángulo izquierdo de Mackenzie Arnold.
Desde el comienzo del complemento, a las Matildas no les quedó otra alternativa que salir a buscar el partido ante la mirada de su público. El ferviente apoyo de una parcialidad que era mayoría entre los 75.784 espectadores fue clave para que el conjunto de Tony Gustavsson luzca mejor y saque rédito de su juego directo.
A los 18 minutos del segundo tiempo, Sam Kerr dio rienda suelta a su velocidad y sacó un derechazo magistral que vulneró la resistencia de Mary Earps, que no había tenido tanto trabajo hasta ese entonces. Era un empate clave que le ponía mucha emoción al cierre del encuentro. Sin embargo, en el mejor momento de las locales, Lauren Hemp se aprovechó de un error de la defensa rival. Ellie Carpenter falló un despeje y la artillera inglesa aprovechó para marcar el 2-1 a los 26 minutos.
El broche de oro llegó gracias a Alessia Russo, una de las grandes figuras, que en este marcado revolucionó la liga inglesa al pasar del Manchester United al Arsenal FC. Su tanto decretó el 3-1 definitivo y una merecida victoria para las europeas, que el este domingo 20 de agosto se enfrentarán a España por el título. La Copa Mundial Femenina de la FIFA llega a su fin. Y tendrá a un nuevo país campeón del mundo.
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